Victoria corta del Villarreal en un gran partido

Durante muchos minutos pareció vivirse una película de suspense en El Madrigal. Tras el mazazo sufrido en el minuto 49, se esperaba con impaciencia el gol de la victoria de los amarillos. Las ocasiones, cada vez más claras, se sucedían sobre la portería de un Bicik que se erigió en el salvador de su equipo. Parada tras parada, evitó una auténtica goleada del Villarreal, que pudo sentenciar una eliminatoria que se inició de la mejor manera posible.

Ni los más optimistas imaginaban un comienzo tan brillante del Villarreal. Un bochornoso error de Bicik en la salida de balón, bien bloqueado por Bakambu, supuso el primer tanto amarillo, a los tres minutos. Una alegría que pilló a muchos espectadores aún en los accesos del estadio y que dio alas a los locales, que lograron intimidar a un conjunto que se mostró demasiado débil en defensa. Fue un acoso total del que sorprendentemente el Sparta de Praga salió vivo.

Únicamente la velocidad por banda derecha de Konaté y la agilidad e inteligencia en los movimientos de Krejci parecían hacer peligrar la ventaja de los hombres de Marcelino hasta los instantes finales de la primera mitad. En uno de esos saques de esquina que ya fueron vitales en Roma, el Sparta lo volvió a hacer, y dejó a El Madrigal sin respiración.

La pausa solo sirvió para que el Villarreal cogiera impulso. Asustó el equipo de la capital checa durante los primeros minutos, pero los castellonenses fueron más incisivos. Una bonita combinación acabó en el segundo tanto de Bakambu, que ya suma siete goles en la competición continental. Capitaneados por un sobresaliente Denis Suárez, se volvió a demostrar que El Madrigal es un talismán para el 'Submarino Amarillo'. En su estadio, cuenta cada partido por victoria. La del Sparta acerca un poco más a los de Marcelino a semifinales, aunque en Praga tocará volver a sufrir de lo lindo.