El Sevilla, sin ideas, empata en Bélgica

Llegaba el Sevilla a Lieja con la intención de convertirse en líder sólido para poder centrarse en la Liga española en lo que resta de la fase de grupos de la competición europea. Decidió Unai Emery introducir hasta ocho cambios en el once titular, porque si de algo puede presumir el técnico vasco este año es que no tiene titulares fijos. Sólo muchas combinaciones, lo que siempre desea un entrenador que pretende marcar un hito en una entidad centenaria como es el Sevilla. Pero la realidad se topó de frente con un equipo que nunca supo cómo hincarle el diente a un Standard de Lieja muy serio atrás y con mucho peligro arriba.

Los sevillistas tuvieron varias ocasiones durante el choque para ganar y también se las encontraron de frente para perder. El empate a cero final fue más que justo a tenor de lo visto y vivido. El Sevilla debió ganar, pero no quiso, o al menos no pudo, pese a que lo intentó. El Standard bastante tenía con no salir escaldado por su público, como le sucedió en la liga belga el pasado fin de semana. El reparto de puntos deja todavía líderes a los sevillistas, pero dentro de un grupo muy apretado.

Empezó el equipo sevillano con maestría y cabeza fría. Jugó a placer en los primeros quince minutos, en los que Diogo, Reyes e Iborra tuvieron ocasiones para adelantar a los suyos y comenzar a poner tierra de por medio. Pero nadie parecía tener la puntería fina en la noche belga. El rival, un Standard de Lieja en mitad de una tempestad con grandes problemas extradeportivos, intentó contentar a una afición enfurecida. Sólo en contragolpes esporádicos creó algo de peligro en la parte final de la primera mitad. En la segunda parte los cambios introducidos por Emery dieron más empaque al centro del campo hispalense.

Deulofeu y Denis Suárez demostraron que son clave en el sistema táctico del Sevilla actual. Bacca intentó hacer olvidar un mal partido en la reaparición de Gameiro en su competición fetiche, en la que no jugaba desde que marcara el último penalti de la tanda en la final ante el Benfica que jugó lesionado. Mal el francés, pero peor el colombiano, que necesita jugar mucho tiempo para poder aclimatarse a partidos complejos como el de Lieja. Ahora toca ganar en los dos encuentros seguidos en casa que tendrá el Sevilla en esta competición. La cuarta pasa por vencer y olvidarse de los malos resultados de las dos últimas jornadas.