El juvenil de la Segoviana se enfrenta a Las Rozas tras vencer el duelo en los despachos

En la recta final de una temporada tan dura como la presente para el División de Honor juvenil de la Gimnástica, metido de lleno en la lucha por una salvación que hace dos meses parecía poco menos que una utopía y hoy para nada tan lejos; cualquier forma de desestabilizar al bloque puede dar sus frutos. Y el equipo de Las Rozas ha estado cerca de conseguirlo con una maniobra de despachos que ha obligado a la directiva que se encarga de la cantera de la Segovianaa recurrir a la mediación de la Federación Española.

Al División de Honor le quedan, al margen de las seis jornadas restantes, dos partidos que debieron aplazarse en su momento. Los dos en casa: contra Las Rozas y contra el Atlético de Madrid entrenado por Fernando Torres. Nada más conocerse la necesidad de aplazar el partido contra el primero de los dos rivales, la Gimnástica tomó la iniciativa proponiendo la fecha del 30 de marzo. El equipo madrileño alegó problemas laborales de su entrenador para desestimarla y, por tanto, la Sego propuso la fecha de hoy, 13 de abril, enviando el acuerdo por correo electrónico al club y a la Federación; sin que Las Rozas contestara nunca con un acuse de recibo. Hasta que a finales de la semana pasada la Gimnástica ve que Las Rozas ha adelantado su partido correspondiente a este fin de semana frente al Leganés, con la idea de tener un fin de semana liberado, jugar contra la Sego el miércoles siguiente y enlazar con la liga regular. Eso suponía trastocar por completo el calendario del División de Honor segoviano para mal, puesto que se le acumularían tres partidos en una semana, incluyendo partidos con un desgaste extra como el del Real Madrid en la Ciudad Deportiva y el del Atleti.

Al llevar el caso ante la Federación, Las Rozas adujo en su defensa que era falso que hubieran llegado los clubes a acuerdo alguno. Al presentar Roberto Álvarez, el coordinador de cantera de la Gimnástica, toda la documentación con los correos electrónicos, el organismo nacional dio la razón al equipo segoviano y el partido se jugará esta tarde en el 'José Antonio Minguela'.

De esta forma, el equipo de Tito Domingo se ha logrado conformar un calendario que consideran el mejor posible para buscar una salvación que no está tan lejos y que estiman que se va a decidir en los enfrentamientos directos con los equipos de abajo.

Evidentemente, el División de Honor debe dar el do de pecho en los partidos que tiene en casa empezando por el de hoy. Ganando los dos aplazados se saldría del descenso, pero es difícil contar con los puntos del enfrentamiento ante el Atlético de Madrid, que visitará finalmente Segovia el día 4 de mayo. Pero ganando a Las Rozas hoy, la salvación quedaría a dos puntos. Dejando a un lado al equipo preparado por Fernando Torres, han de visitar el 'Minguela' rivales directos como el Flecha Negra, el Adarve y el Tribal Valderas en la última jornada. Esos tres partidos están señalados en rojo por cuerpo técnico y jugadores.

Si la salvación termina pasando por sumar 38 ó 39 puntos, está claro que el División de Honor debe sacar algo fuera y la primera oportunidad la tiene este fin de semana en un desplazamiento largo, a Villanueva de la Serena, pero con el Villanovense ya matemáticamente salvado tras haber firmado una temporada fabulosa. El plan pasa por salir con intensidad para buscar que, ante un rival sin incentivos clasificatorios, la necesidad gimnástica se convierta en virtud. El resto de salidas son muy complicadas. Hay que jugar en Valdebebas ante el filial del Real Madrid en una fecha por definir entre el sábado 30 de abril y el domingo 1 de mayo. La Gimnástica ha solicitado que el partido sea el sábado para ganar un día de descanso de cara al partido frente al Atlético de Madrid. La última salida, en la penúltima jornada, es también cercana pero difícil, ante el filial del Leganés.

Metido en una dinámica de cuatro partidos consecutivos sin perder por primera vez en toda la temporada, el juvenil gimnástico ha cambiado la cara a una situación que se estaba enfocando peligrosamente hacia el descenso. La recuperación de ciertos jugadores importantes tras lesión está devolviendo empaque al equipo. También el punto de inflexión marcado por una serie de charlas entre la coordinación, el cuerpo técnico y el propio vestuario. Se logró el acuerdo de que se tenía que vender caro el descenso si es que tenía que llegar y eso, hoy, no está tan claro.

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