El CD La Granja encuentra la escuadra y su primer triunfo ante el Júpiter Leonés (3-1)
SEGOVIA ·
Los segovianos resuelven el duelo con dos golazos de Jonan y Vitolo y abandonan la zona de descensoEl CD La Granja hizo de la necesidad virtud para sumar su primera victoria de la temporada. Con apenas 15 convocados, a la espera de que lleguen los tránsfer de la federación de origen de Lucho, Tomás, Ramón y Dani, un triunfo como el cosechado en El Hospital, con dos auténticos golazos, tiene un valor incalculable. Si otros días no quiso entrar el balón, ayer la estadística le devolvió el favor al cuadro segoviano, que canjeó sus dos primeros disparos entre palos. A la espera de que el proyecto, gestado a partir de un ingente casting veraniego, coja velocidad de crucero, todo colchón clasificatorio es poco para un equipo que duerme fuera del descenso.
CD La Granja
Lorenzo, Cuadri, Demi, Thanos, Pluma, Velasco, Vitolo, Caño (Kike, min. 54), Dani Lázaro, Jonan (Mario, min. 92) y Cristian (Seung, min. 81).
3
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1
Diego, Abej (Juan Pino. Min. 71), Miguel (Willi, min. 71), Álex, Marcos, Jairo (Amadou, min. 57), Javi Fernández, Christian Fernández, Aarón, Álvarez y Moha.
-
GOLES. 1-0 (min. 44) Jonan; 2-0 (min. 60) Vitolo; 2-1 (min. 85) Aarón; 3-1 (min. 87 Jonan).
El filial de la Cultural salió con la firme intención de dominar el juego tocando el balón por abajo. Aarón, todo un diablo, era la principal amenaza granjeña. El 7 caracoleó dentro del área en la primera acción reseñable del encuentro antes de enganchar un fuerte disparo al primer palo que repelió Lorenzo. El meta acompañaría con la mirada poco después un tiro lejano de Christian Fernández que la defensa desvió lo justo a córner. El 10 leonés tendría una ocasión más nítida tras una acción individual de mérito de Moha, que recibió la pelota, dribló en área granjeña y le cedió una asistencia acaramelada. Su tiro, sin embargo, se fue alto.
La canícula no perdonó en El Hospital. En la sobra del fondo sur había un grupo de jubilados que pedía la roja ante una falta sobre Jonan. El 9 colombiano, eje necesario del ataque granjeño, tenía dos centrales de envergadura ante los de medirse. Cristian era la bala encargada de perseguir sus prolongaciones. Cuadri, valiente en el lateral derecho, buscó al punta con un pase envenenado que no supo embolsar. En la mejor ocasión local del primer tiempo, Dani Lázaro tiró con peligro la falta de la discordia, que se marchó cerca del palo de la barrera.
Fue a más el cuadro visitante en el tramo final de la primera parte y se prodigaron las ocasiones. Primero fue Marcos, que le ganó el duelo a Cuadri y puso un centro al punto de penalti que no cazó Moha por un suspiro. Fue el previo a una ocasión pintiparada, la que tuvo Javier Álvarez, que remató solo en el punto de penalti un envío medido de Aarón desde la derecha. Antes del testarazo, la zaga granjeña estaba sin respuesta ante la hueste de camisetas negras que se había incorporado a la jugada. La pelota, ante el asombro del protagonista, se marchó alta.
Así las cosas, cuando parecía que el descanso era una meta volante deseada por La Granja, llegó el signo de exclamación. Jonan, acostumbrado a fajarse de espaldas lejos de la portería, se hizo con un balón en la esquina izquierda del área, se acomodó de espaldas y enganchó un disparo inmaculado a la escuadra. No es una metáfora; el balón tocó la cepa inferior del travesaño y botó rendido a la red. Su paseíllo de celebración hacia el banquillo, golpeándose el pecho, mostraba la importancia de una diana así en el primer tiro a puerta de su equipo.
El paso por vestuarios no matizó el vuelco anímico que había dado en el encuentro tras el gol. El egipcio Seifil calentó en el descanso ante un posible relevo en la portería, pues Lorenzo se marchó al intermedio con molestias en la rodilla. No fue finalmente necesario y el primer movimiento de Fonseca fue reforzar el centro del campo. Relevó a Caño, que tenía amarilla, y armó un doble pivote con Kike, que se unió a Víctor Velasco para cerrar las compuertas. El Júpiter reaccionó con Amadou, un peligroso atacante internacional con Malí en la categoría sub-21.
No tuvo tiempo el filial leonés para perpetrar la remontada. Jonan fallaría en el control, pero supo proteger el balón para forzar la falta. Vitolo era el encargado de servir lo que el guión decía que sería un centro lateral a los primeros metros del área. El 10 granjeño, un talentoso verso libre, inventó un guión alternativo y enganchó un tiro soberbio desde 30 metros que se coló por la escuadra izquierda. El meta, obligado a adelantarse para despejar un envío envenenado, no tuvo margen para regresar bajo palos. Asestado el golpe, los brazos estirados de Vitolo en la celebración tenían un claro aroma a victoria.
Con todo, tocaría sufrir. Seung, aún con el idioma como cuenta pendiente, no entendió los gritos de los compañeros, que pedían tirar el balón fuera. Así lo hicieron, pero él persiguió el esférico. Acto seguido, recortó distancias el Júpiter de la mano de Asier, que enganchó un tiro similar al primer gol de Jonan, un justo premio a su actuación. Sin tiempo para temblar, La Granja recuperó el colchón a la contra. Dani Lázaro, feliz con espacios, enganchó un tiro cruzado y Jonan embocó el despeje del meta. Si antes del duelo retumbaba 'Thunderstruck' en el vestuario visitante, el grito de gloria fue para La Granja.
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