A grandes males, grandes remedios

La temporada de la Gimnástica Segoviana es una etapa de montaña: flecha para arriba, flecha para abajo. La derrota ante el Navalcarnero del 18 de marzo iba a ser el punto de inflexión definitivo: permanencia en el bolsillo, pero ya está. Esa derrota, la primera en casa, dejó muy tocado al vestuario y llegaron réplicas, como el 1-5 del Cacereño. Y el equipo pasó del tercer puesto al séptimo, el sueño del 'play-off' se escapaba. La maldita flecha. Pero todo cambió con un gol, el de Diego Gómez. Media hora después, el 0-2 ante el Socuéllamos era un 3-2 y la Sego depende de sí misma en las dos últimas jornadas. Así cambió la crónica de la temporada: del equipo que había tocado techo al que peleará hasta el final por un hacer historia.

El fútbol es un deporte tan incierto que exige improvisar, jugar con las cartas que han caído en gracia, aunque no haya ases. Y a Ramsés le faltaban unos cuantos ante el Socuéllamos, un colista vendió cara su piel. «Un equipo que viene prácticamente sin opciones de mantener la categoría haya hecho el partido que ha hecho aquí es muy de alabar. Hemos arriesgado muchísimo y ha salido bien. Pero lo hemos pasado…. No se lo deseo a nadie».

El reto de un duelo ante el colista es lidiar con el favoritismo. «Son partidos peligrosísimos. De los 1.400 que hemos venido aquí, 1.395 pensaba que ganábamos fácil. Y eso es muy complejo de gestionar con los jugadores». Una sensación que se potenció con los pinchazos de Villanovense y Estepona por la mañana: una victoria permitía sobrepasarles. Sí cumplió el Cacereño, que se fortifica en el cuarto puesto con 52 puntos. La Segoviana es quinta –la última plaza de 'play-off'– con 49; por detrás, Villanovense (48) y Estepona (47). Todos tienen ganado el 'average' con los azulgranas, pero ninguno está de dulce. De los últimos 15 puntos en juego, Cacereño y Estepona suman ocho, por siete de la Segoviana y cuatro del Villanovense. Dejarse puntos es la norma, quizás el 'play -off' sea para el menos malo.

Así que la Segoviana parte con ventaja en las últimas dos jornadas: ambas con horario unificado el domingo a las 12:00 horas. La primera, en Guadalajara; la segunda, con la visita del Adarve, la bestia negra a la que no ha ganado nunca. Antes, el cuadro madrileño recibirá al Estepona –un momento magnifico para que los de Manu González echen un cable a su exequipo– y el Villanovense recibe al Cerdanyola, inmerso en la lucha por la salvación. En la última jornada, los malagueños reciben al Atlético B –en la pelea por ser segundo– y el Villanovense visita al Alcorcón B, en descenso; será fundamental que los dos filiales sigan jugándose algo dentro de siete días

Ramsés elogia al Guadalajara como un equipo «que juega al fútbol de maravilla» pese a que ya no tiene opciones de jugar el 'play- off, noveno a siete puntos de la Segoviana. «Me atrevo a decir que es el equipo con peor suerte de la categoría». La Segoviana aseguraría el 'play-off' con una victoria, una derrota del Villanovense y que el Estepona no gane.

Esa lucha contra las circunstancias la ejemplifica Oliva, el juvenil que ocupó por tercera vez la portería del primer equipo y no conoce la derrota. «Es muy joven, pero tiene mucha solvencia, una madurez impropia». Un juicio que extendió a Ivo. «Sale con el equipo en la UVI y se lo echa a la espalda con 20 años, es una locura». Porque la Sego volvió a puesto de 'play-off' sin Adrián, Acuña, Rubén, Arribas, Hugo Díaz y Carmona, toda una oda a la profundidad. «Unos juegan más y otros menos, pero todos han sido partícipes. Lo que más me satisface es que cuando acabe la temporada no va a haber ni un solo futbolista que pueda irse a casa diciendo que no ha pintado nada».

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