«España no es sólo calidad, es mucho más»

España reafirmó ante Turquía todo lo bueno que escribimos sobre ella tras el estreno. Mostrando una gran energía en la presión tras pérdida, y con mucha eficacia en la recuperación de balón, el equipo de Del Bosque logró jugar mucho tiempo en campo contrario. Cuando recuperas el balón tan arriba y con esa energía, y además le unes ese ritmo de juego, consigues que la sensación de que vas a marcar sea constante. España tiene tantas soluciones y de tanta calidad que, aunque falles ante la portería, la selección rival siente el peligro de forma continua.

Quiero insistir: lo de España no es sólo calidad; es una gran vocación ofensiva, desde el orden y la intensidad. Laterales y extremos dieron una gran amplitud al equipo, pero pienso que es de justicia destacar a Álvaro Morata, quizá el delantero más completo del fútbol europeo. Lo pienso así porque hace muchas cosas bien: tiene un cambio de ritmo que le permite salir de situaciones complicadas, posee remate, trabaja mucho y además, es muy ágil para lo alto que es. Se mueve en zonas intermedias y eso hace dudar a los centrales del equipo rival, porque además es capaz de asociarse de forma efectiva. También Busquets e Iniesta estuvieron muy bien todos. España funcionó de maravilla a nivel colectivo.

Antes vimos a Italia ganarle a Suecia y acceder a octavos de final con antelación. El equipo de Antonio Conte mostró las virtudes de la vieja Italia pero con la sensación de ser un equipo renovado en muchas zonas del campo, una selección que defiende muy bien y cuando ataca hace daño. A eso hay que añadirle la competitividad de siempre, como confirma el gol en los últimos minutos de partido.

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