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Luis Muñoz (tercero por la derecha) y el veterano exjugador perico Rafa Marañón (segundo por la izquierda), ayer, en la comida en el restaurante Copaboca. MANUEL BRÁGIMO

Entre Frechilla y el amor 'perico'

El empresario palentino Luis Muñoz, accionista del Espanyol, vibró con el triunfo de su equipo en un palco en el que hubo rostros conocidos como Capdevila, Rufete o Caminero

JUAN DE ARCE

Palencia

Miércoles, 15 de diciembre 2021, 01:09

Pasó apuros el Espanyol en la eliminatoria copera con el Palencia Cristo Atlético, primero el lunes con su viaje a la capital palentina, puesto que el vuelo que debía aterrizar en el aeropuerto de Villanubla no pudo hacerlo debido a una avería del sistema ... antiniebla y tuvo que ser desviado hasta Madrid a causa de la niebla. Ello provocó que la plantilla 'perica' pernoctase en la capital de España y viajar ayer a Palencia, llegando sobre las 13:00 horas al hotel Rey Sancho y sin tiempo para poder tener esa primera toma de contacto con el césped de la Balastera.

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Un terreno de juego distinto al que pisaron en la primera ronda de la Copa del Rey ante el Solares de Regional Preferente, un campo pequeño de hierba artificial y donde vencieron por un ajustado 2-3. Loren Morón materializó un 'hat-trick' con el que se llevó el balón a casa, provocando, a modo irónico, la reclamación del Solares por parte de uno de sus jugadores, Víctor Palacio, que argumentó en redes sociales: «Que nos devuelva el balón, que no andamos sobrados». El delantero marbellí recogió el mensaje y no dudó en enviar 30 balones hacia Cantabria como compensación. Ayer no tuvo que rascarse el bolsillo.

Sí tuvieron que sacar la cartera en la comida de hermanamiento que acogió a aficionados 'pericos' que se trasladaron desde tierras catalanas a Palencia, que fue en la vinoteca Copaboca, entre cuyos propietarios está otro de los protagonistas del día, Luis Muñoz, natural de Frechilla y persona muy vinculada al fútbol palentino desde su etapa como vicepresidente del extinto Palencia CF, pasando por la presidencia del Castilla Palencia, club decano de la ciudad y que se disolvió el año pasado, hasta llegar a sus dos grandes pasiones, el mundo del vino y el Espanyol.

Luis Muñoz lleva décadas al frente de las bodegas Copaboca, menos tiempo, eso sí, que el que suma de pasión por el club blanquiazul, que surgió cuando era niño en la década de los sesenta. «Soy palentino de pura cepa, pero desde pequeño siempre quise ser del Espanyol. En la escuela todos eran del Barcelona o del Real Madrid, pero yo quise hacerme del Espanyol», comentaba orgulloso acerca del equipo catalán, del que, por cierto, es accionista. Tal es su pasión por el club 'perico' que decidió formar la Peña Espanyolista de Palencia un año antes de la final de Copa del Rey en Valencia, en el año 2000. Esta peña, dirigida junto a Álex, su hijo, fue aumentando en número de socios, creando el conocido 'Premio Lechazo', un reconocimiento que se entrega a final de temporada y que se ha otorgado a figuras tan ilustres de la entidad como Sergio González, Miguel Ángel Lotina o Rafa Marañón, futbolista emblemático del equipo 'perico' que también acudió a esa comida de unión entre aficiones. «La pandemia hizo que tuviéramos que parar nuestra actividad, pero volveremos con más ganas que nunca», señalaba Muñoz.

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Joan Capdevila, campeón de Europa y del Mundo con España y portavoz del Espanyol. MARTA MORAS

Su historia personal va unida a la de otro protagonista que ayer vivió una noche muy especial. David Nieto, presidente del Palencia Cristo Atlético, formó parte de aquella directiva en los últimos momentos del Palencia CF, donde coincidió con Luis Muñoz, manteniendo una amistad que todavía perdura. «Para nosotros esto es un sueño, jamás hubiera pensado que a estas alturas íbamos a enfrentarnos a todo un Primera División», comentaba antes del partido David Nieto. Por el contrario, Luis Muñoz no pudo traicionar a sus colores, admitiendo entre risas que «quiero que gane el Espanyol, no puedo evitarlo», para seguidamente mandar un mensaje a los aficionados al fútbol en la ciudad. «Este partido debe marcar un antes y un después para el Palencia Cristo. Donde se demuestra el poder de una afición es en los partidos de su categoría», haciendo mención de que en un partido como el de ayer «es normal casi llenar por completo la Balastera, pero lo difícil es hacerlo cada domingo».

Son varias las coincidencias que rodearon al encuentro, también entre futbolistas del combinado visitante. Dani Hernández, portero del Palencia Cristo, coincidió en las categorías inferiores del Real Valladolid con Fernando Calero, defensa central del Espanyol. Además, otro de los grandes ausentes del choque como Raúl de Tomás, estuvo durante esa etapa en la entidad pucelana, aunque él pertenecía al primer equipo. Sergi Gómez, también defensa de los catalanes, ya jugó en la Nueva Balastera como titular en el año 2014, en un partido que enfrentó a la selección española sub-21 contra Alemania, donde 'la Rojita' se impuso por 2-0 al conjunto bávaro.

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Rubén Gala, con Rufete y José María Durán, consejero delegado del club blanquiazul. MARTA MORAS

Al margen de los antecedentes que rodearon al encuentro, el ambiente que pudo vivirse ayer en el feudo palentino fue, sin duda, para recordar. Un palco con algunas caras conocidas como Joan Capdevila, campeón de Europa y del mundo en el Mundial de 2010 de Sudáfrica y actual portavoz del club 'perico'; Francisco Rufete, director deportivo del Espanyol y exjugador blanquiazul y de otros equipos como el Valencia o el Málaga, o José Luis Pérez Caminero, exfutbolista del Real Valladolid y Atlético de Madrid. Todo ello, sumado al ambiente festivo en una Balastera casi repleta que vibró con el esfuerzo de los jugadores de Rubén Gala, que pusieron en apuros al conjunto de Vicente Moreno. No fue un paseo triunfal para los 'pericos', que tuvieron problemas no solo para aterrizar su avión sino también sobre el césped de la Balastera, cuando el tanto tempranero de Frodo también les puso la niebla delante de sus ojos.

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