El Becerril abandona la última posición

El Becerril volvió a la senda de la victoria en la noche de ayer ganando por la mínima al Santa Marta de Tormes gracias a un gol de Kike Simal que da alas al conjunto morado para seguir peleando por la categoría. La mala suerte, las lesiones y los parones por culpa de la pandemia, poco a poco dan paso a las buenas sensaciones que el equipo está mostrando en sus últimos choques ligueros.

Los dos equipos saltaron a un Mariano Haro que se encontraba encharcado y en algunos sitios hasta impracticable debido a las últimas lluvias y la nevada de la pasada semana que directiva y vecinos habían retirado del terreno de juego los días previos. Por si fuese poco debido al horario el partido tuvo que ser a puerta cerrada ya que el toque de queda impuesto por la Junta de Castilla y León hacía imposible la presencia de público que animase a los morados. El árbitro decretaba el comienzo del encuentro y fueron los charros los que tomaron la iniciativa en los primeros compases del encuentro. Las llegadas fueron puntuales aunque sin llevar demasiado peligro a la meta defendida por Sevi.

Sin embargo los palentinos lograron llevar el partido a su terreno y en el minuto 11 dispusieron de su primera ocasión con cierto peligro tras un pase en profundidad a Guti que se internó en el área rival, aunque el plan finalmente fue desbaratado por la zaga charra. El balón comenzaba a circular por el centro del campo sin que ninguno de los dos equipos controlase la posesión. La poca precisión y los errores, sobre todo en los pases forzaban las pérdidas de balones en ambas escuadras. Incluso Edu Narganes tuvo que pedir más contundencia sobre todo a la hora de despejar los balones que entrañaban algo de peligro en el área morada.

En el minuto 22 llegó la ocasión que más peligro generó hasta el momento para los morados. Sierra lograba rematar un balón de cabeza tras un saque de esquina que finalmente se iba fuera por muy poco. Pocos minutos más tarde un error en un despeje de los morados propició un saque de esquina que volvió a generar nervios en la defensa palentina aunque lograba despejar el balón, no sin muchos problemas, para hacerse con el control del balón.

Isma pudo adelantar a los morados en el minuto 33 con un bonito saque de falta que se iba por muy poco a la derecha de la portería defendida por el meta charro Félix. Poco tiempo después fue Kuko el que buscaba la suerte con un tremendo disparo que también se iba fuera. El partido se fue al descanso con el marcador inicial esperando ese plus que mejorase el juego morado en la definición.

Pese a que el Becerril salió buscando adelantarse en el marcador, fueron los charros los que llevaron la iniciativa durante los primeros minutos del segundo tiempo, aunque el partido estaba mucho más abierto que durante los primeros 45 minutos. El primer susto no llegaría hasta el minuto 67 después de que Gonzalo, que acababa de entrar en el terreno de juego, botase un balón de falta que se fue por milímetros por encima del travesaño.

Pero cuando los rojillos habían mejorado su juego y generaban jugadas de peligro real fueron los palentinos los que lograron adelantarse en el marcador gracias a Kike Simal que se aprovechaba de un rechace tras un saque de esquina para empujar el balón dentro de la portería defendida por Félix. La euforia se desataba en el cuadro palentino que empezó a creerse que podía ganar el partido.

Tras varios sustos generados por el equipo rival generados sobre todo en jugadas a balón parado y que estuvieron a punto de dar un buen susto a los morados, el Becerril se aprovechó de varias contras para volver a llevar peligro al área rival. La necesidad de conseguir el segundo tanto y poder así respirar tranquilos era más importante que nunca y el equipo no cejó en su empeño hasta los minutos finales. Kuko tuvo la última para poner tierra de por medio tras darse una buena carrera por la banda izquierda que le plantó solo frente al portero rival. Finalmente el jugador morado disparaba un balón que se iba rozando la línea de gol.

Tres puntos que saben a gloria para los palentinos que ven cómo se alejan de la posición de colista que ahora ocupa el Peñaranda y por delante otro partido importante, el derbi que les enfrentará el domingo a las 17:00 horas en La Balastera a un Palencia Cristo que lleva sin jugar desde el pasado mes de diciembre.