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«Nos van a temblar un poco las piernas cuando veamos las gradas de La Balastera llenas de aficionados», señala el técnico del Becerril, Edu Narganes. Será la primera vez que el entrenador morado juegue como local en el estadio palentino. Ya estuvo como preparador físico con el desaparecido Palencia y también con el Cristo Atlético, pero nunca como director de juego del equipo. «Nosotros estamos acostumbrados a jugar en campos pequeños, porque somos un conjunto humilde. Jugamos en campos pequeños o en un derbi ante el Palencia Cristo ante 600 personas. No más. Pasar de ahí a 5.000 aficionados, por ejemplo, o los que vayan a ser, pues imagínate la diferencia. La que hemos liado, como dicen los jugadores en referencia a la Copa», agrega.
Cierto es que el Becerril ha podido jugar en campos de mayor envergadura, como puede ser el del Zamora, pero nunca han llenado las gradas, ni siquiera han llegado a la mitad del aforo. «Jugar en La Balastera y encima una Copa del Rey, pues está muy bien. Pero si encima digamos que juntamos a todo el fútbol palentino, que tenga un poco de sentimiento por el Becerril, pues al principio estaremos más nerviosos. Si es así, el fútbol en Palencia no está muerto y Palencia quiere un fútbol de categoría», señala Narganes, que ha dado estos días de fiesta, vacaciones a la plantilla.
Desde que lograsen el empate a domicilio la pasada jornada –ante el Almazán–, los jugadores del Becerril están de descanso, aprovechando que este fin de semana no hay Liga de Tercera División porque se disputa en La Rioja la primera fase de la Copa del Regiones UEFA. Algunos están en Marruecos, otros de casa rural o incluso en París. Todos descansan y reponen fuerzas con los suyos para lo que les viene. El partido más importante de la historia del Becerril. «Hemos intentado darles el mayor tiempo posible de vacaciones. En Navidad no podemos irnos a ningún lado porque se juega y lo decidimos desde el primer momento porque les he pedido demasiado entre los partidos de Liga y la Copa del Rey», sentencia. Hasta el lunes a las 20:30 horas. Ahí ya estarán todos de nuevo con la cabeza y el corazón puesto en Becerril.
El capitán del Becerril, David González 'Diestro', finalmente no podrá saltar al campo de La Balastera para medirse a la Real Sociedad. Tampoco está de vacaciones, como la mayoría de sus compañeros. Está en casa, guardando reposo –con una rodillera que le limita el movimiento– y trabajando ya en su recuperación. Además de la lesión en el ligamento lateral interno de la rodilla y de una pequeña lesión en el menisco, también sufre una rotura en la inserción del ligamento cruzado. «El traumatólogo me ha dicho que nada de jugar. Estoy trabajando ya para estar de vuelta cuanto antes, pero claro, de la Copa del Rey me despido», señala Diestro. «El lunes estaba fastidiado, pero estoy animado de momento, haciéndome a la idea de que no puedo jugar. Veremos cómo estoy según se vaya acercando el partido. Encima viendo que se va a llenar La Balastera. Es mala suerte, pero qué le vamos a hacer. En nada, estoy de vuelta», agrega.
Para algunos futbolistas morados, como para Melero, este partido es el punto y final a una gran trayectoria futbolística. Qué mejor que colgar las botas –sea esta temporada o la siguiente– con un partido de Copa del Rey, ante un Primera División, ante un histórico como es la Real Sociedad y llenando –o casi– el estadio palentino. «Los jugadores están muy ilusionados. No ven la hora de que llegue el partido y tienen con muchas ganas. Al final esto son ocasiones únicas que hay que agarrar porque si no se marcha para siempre», señala Narganes.
La venta de entradas va viento en popa. En la mayoría de los locales donde se han distribuido están prácticamente agotadas o agotadas. «Si todo sigue así, que parece que va a haber un lleno o casi lleno, pues será impresionante jugar en La Balastera», reconoce Narganes, que también cuenta los días para el choque copero.
«Las tribunas están vendidas enteras porque las empresas colaboradoras de Becerril y los que llevan apoyando muchos años al club, han encargado directamente las entradas a la directiva y el club se las ha vendido porque son personas que llevan veinte años ayudándonos», argumentó ayer el delegado, Esteban Gutiérrez. «Hemos sacado a la venta lo que tenemos», añade.
El cuerpo técnico del Becerril tiene la fecha del domingo grabada en el calendario. Y es que su rival de Copa del Rey, la Real Sociedad visita al Real Valladolid en Zorrilla. «Nuestra intención sí que era ir al estadio a verlos allí. Escribimos al Real Valladolid, pero ni siquiera nos ha contestado. Así que no sé si compraremos las entradas o finalmente lo veamos en casa todo el cuerpo técnico. Sí que le veremos, pero no sé si en directo o no», afirma Edu Narganes, que ya estudia al rival del jueves 19 de diciembre.
«Es una incógnita si lo que veremos ante el Real Valladolid es lo mismo que vendrá a La Balastera. Juegan un partido muy importante la jornada anterior, que es contra el Barcelona, y pondrá un buen once. Imagino que quienes no salgan de inicio en ese partido tendrán sus minutos en La Balastera. Así que es una incógnita. Pero claro, no es lo mismo jugártelo a dos partidos y que pase algo extraordinario o un milagro en La Balastera, pero luego juegan en Anoeta y nos meten una fundida. Pero siendo todo a una carta... Nosotros sabemos que tenemos un 0,01% de posibilidades, lo tenemos claro, pero vamos a competir, claro está. No pueden venir muy relajados», afirma Narganes.
Y es que la Real Sociedad ya ha patinado, varias veces, en Copa del Rey. Y –seguro– que no quieren volver a tropezar con otro equipo pero, en definitiva, con la misma piedra. La Real Sociedad, bicampeona de Copa del Rey –en 1909 y en 1987– cayó en primera ronda copera hace tan solo dos años ante el Lleida de Segunda División B, perdiendo en Anoeta por 2-3. Pero antes ya mordieron el polvo en la Copa ante equipos de menor categoría como Burgos, Zamora, Beasain u Hospitalet.
El Becerril jugará como lo ha hecho siempre. No va a cambiar nada para el día más importante de su vida. «Nosotros no vamos a rectificar nada, no es día para hacer cambios. Vamos a trabajar, correr, sudar la gota gorda y llevar el partido de la mejor manera posible y competir. Nosotros a lo que somos, somos el Becerril. No somos un equipo agresivo. Intentamos dominar la situación con balón o presionar arriba para intentar robar lo más cerca posible de la portería contraria», analiza. «Eso en Tercera División, claro. Ante un Primera División, quizás no hay que ir a apretarles mucho», agrega el técnico morado.
Y es que el Becerril ha llegado hasta donde está siendo como es y así lo seguirá haciendo ante los jugadores de Imanol Alguacil, a los que –cuando las piernas les dejen de temblar– les tratará de tú a tú.
Para irse adaptando a su nuevo campo, a jugar como local en La Balastera, la plantilla del Becerril entrenará en el estadio palentino el próximo miércoles ya, ocho días antes de que se cite con la historia y de que la Real Sociedad pise por segunda vez el césped palentino –ya lo hizo hace dos años en un amistoso ante el Sporting de Gijón–. «Vamos a entrenar ya en La Balastera para que los jugadores vayan haciéndose a las medida, al césped, para que se adapten pronto a nuestro nuevo campo», concluye el técnico Edu Narganes.
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