El Fondo de Garantía Salarial abonará las deudas a los jugadores y al entrenador del Segovia Futsal

El propio Meléndez examinaba la resolución con más distancia y de una forma más fría, aunque reconocía que «no deja de ser una satisfacción personal y profesional inmensa. Al final, hemos tenido que litigar contra el FOGASA, pero también contra la LNFS. Porque la Liga, cuando iniciamos el proceso y le pedimos los datos de las antigüedades de los jugadores y sus contratos, nos dijo que no los tenía. Que no tenía la obligación de conservarlos y no los conservaba, cosa que es falsa, porque existe un convenio por el cual debe hacerlo y porque, además, la propia Liga edita guías con la trayectoria y la antigüedad de todos los jugadores. Datos que se ha negado a facilitar al Juzgado». Esos fueron algunos de los grandes problemas que se encontraron al principio, cuando iniciaron el proceso en abril de 2019. Luego la lucha contra FOGASA ha tomado otra línea más de justicia social: «Se supone que el fondo está para ayudar a los trabajadores que se han quedado en un momento determinado desasistidos, no para negociar con ellos o recortarles lo que es suyo. El FOGASA pretendía algo como dividir el salario de jugadores cuyos contratos duraban nueve meses entre todo el año, entre doce. De esa manera las cantidades que resultaban eran ridículas, inadmisibles».

El tiempo les había dado la razón ya en uno de los puntos, puesto que la primera parte de todo suponía que el fondo reconociera las deudas que tenían que ver con el salario reflejado de todos los componentes de Segovia Futsal. Eso jugadores y cuerpo técnico sabían que lo tenían, en cierta manera, ganado. Faltaba algo muy importante, que era el reconocimiento de ciertas cantidades demostrables pero que no se entendían como relacionadas con el salario. Ahí se incluyen todos los gastos que ciertos jugadores tenían reconocidos por el club como dietas, manutención, primas o, lo más revolucionario, que la indemnización por despido quede reconocida dentro del cálculo del salario de los jugadores. «Que son 11 días por año trabajado, que no es nada, pero han sido muy valientes y se los han ganado», comentaba exultante el presidente de la AJFS, Antonio García Plata.

«La Comisión Mixta aprobó pagar lo correspondiente por el contrato federativo, pero fuimos a por todas, no nos resultaba suficiente», argumenta García Plata. «Denunciamos al FOGASA, se nos denegó, nos fuimos al Juzgado y se nos ha reconocido». El presidente de la Asociación de Jugadores reconoce que, al principio, se habían centrado en la defensa de los compañeros, pero que al final también decidieron incluir en el proceso al entrenador, Diego Gacimartín. Y no para de destacar la actitud que todo el grupo ha tenido durante este tiempo: «Han confiado en nosotros y nos han dejado hacer. Decidimos reclamar las indemnizaciones, un dinero que ellos daban por súper perdido, que estaba olvidado. Me alegro mucho por todos ellos porque han sufrido mucho en todo este tiempo».

La primera cantidad, la de los salarios reconocida tiempo atrás por la Comisión Mixta, ya está abonada. Ahora a todos les queda esperar a que estas nuevas indemnizaciones les lleguen. Pero más allá, este éxito que ha tenido a la plantilla de Segovia Futsal como protagonista, puede animar a otros compañeros a luchar por sus derechos laborales.