![Tres lustros de apoyo al fútbol femenino](https://s2.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/201910/17/media/cortadas/dbase036-U80155449040biE-RnZ4Q5R3T1jFjtQ6M51knUO-624x385@El%20Norte-ElNorte.jpg)
![Tres lustros de apoyo al fútbol femenino](https://s2.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/multimedia/201910/17/media/cortadas/dbase036-U80155449040biE-RnZ4Q5R3T1jFjtQ6M51knUO-624x385@El%20Norte-ElNorte.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
El fútbol se escribe también en femenino, pero hubo un tiempo en el que quizá no fue así. En 2003 un grupo de 22 niñas comenzó a dar sus primeras patadas al balón al amparo de la Federación de Castilla y León de Fútbol. ... Entonces, Manuel Heredia, Manuel Vidal, Miguel San José e Ignacio Quereda convinieron en la idoneidad de crear una escuela que promocionara el fútbol entre las chicas. Aquella escuela ha arrancado recientemente su decimoquinto año, un nuevo curso en el que se acerca al centenar de jugadoras que proceden de todos los rincones de la región, ya jueguen federadas en equipos o no.
Su primer reto, como recuerda su director, Manuel Vidal, fue cambiar el chip de una generación de padres que no tenían tan normalizado como hoy el hecho de que pudieran jugar chicas con chicos. «Todavía hoy está costando un poco. Se ha necesitado mucho trabajo y divulgación de cara a esa normalización, pero al final la escuela ha caído por su propio peso y por eso estas últimas ediciones ha habido casi un centenar de chicas«, considera el director.
Lo primero en lo que inciden los técnicos –todos titulados– es en los valores intrínsecos a la práctica del deporte, tales como el respeto o el compañerismo. Con esa base, cobra protagonismo el balón, sea cual sea la edad o procedencia de las chicas, puesto que algunas tienen equipos en los que trabajan bajo una táctica y un sistema de juego, en cuyo caso el trabajo es de tecnificación y pasa por buscar la mejora, mientras que otras pequeñas jugadoras entran en fase de iniciación, a ver si les gusta. «No tienen ninguna presión y aquí se divierten y se van picando. Cada año lo habitual es que según acaba la escuela busquen un equipo para vincularse la temporada siguiente al fútbol con más intensidad», dice Vidal, quien destaca este como uno de los grandes logros del trabajo que hacen. «La razón la saben mejor las familias, pero creo que será porque se ilusionan, se van contentas y ven que disfrutan del deporte. El éxito y nuestra satisfacción radica en ver que cada año rondamos el centenar de jugadoras y todas se van a su casa contentas», añade.
Tal es así que cuando agotan sus fases formativas en la escuela –que ha dejado de contar con la categoría cadete porque la evolución vivida a nivel de equipos y clubes hace que sea difícil compatibilizar competir con estas sesiones– pueden seguir como colaboradoras, ayudando a las más pequeñas a formarse mientras siguen dando pasos adelante.
De todo lo vivido durante estos 15 años, una de las cosas que más duele a Manuel Vidal es que en el seno de algunos clubes se vea la escuela con recelo, como si les fueran a 'quitar' a las niñas. No es así, porque aquí no compiten. Ciertamente, su presencia en ella puede hacer que clubes con equipos femeninos asistan para captar a las jugadoras, «pero en ningún caso» se les da ningún tipo de información sobre ellas; el respeto a los clubes de origen es mayúsculo y rotundo. Así lo obliga la ley, pero también es algo autoimpuesto. «Hay clubes que no informan a las niñas de que esta escuela existe, a pesar de que todo lo que mejoran va en su propio beneficio, porque en sus clubes demuestran lo aprendido aquí. Me apena que no se respete la voluntad de las niñas y sus familias, porque perjudica al fútbol femenino», lamenta el director sobre el comportamiento de los clubes que usan la escuela de forma perniciosa.
Durante estos tres lustros el 'futfem' ha cambiado mucho gracias a la suma de muchas voluntades. Por parte de la Federación, Manuel Vidal señala como pilar fundamental el trabajo de Manuel Heredia, vicepresidente y delegado federativo. También han tenido que ver los clubes, como no podía ser de otro modo, o los medios de comunicación,que han dado más importancia a este fútbol, también, a raíz de la entrada de Iberdrola en él. «Todos hemos puesto un poco de nuestra parte, por eso ha crecido el número de equipos en Valladolid y en la región», agrega el director, que incide en la provincia como motor, con varios equipos en categorías de gran repercusión. El CD Parquesol, no en vano, es el único que milita a día de hoy en la segunda categoría nacional, con algunas jugadoras que han pasado por esta escuela.
Por debajo, la FCYLF permite que las niñas jueguen con niños un año menores para poder desarrollarse de manera proporcional a ellos: el físico de los chicos tiende a ser superior, de ahí que en la comparativa injusta ellas salgan a menudo perdiendo, mientras en los apartados técnico y cognitivo su evolución es igual o mayor. Así, era habitual que las chicas solo jugasen los minutos 'de la basura' o que esa opción las llevara a jugar con niños más pequeños. Hoy sigue pasando, aunque en menor medida, dado que cada vez más se cree en la formación de las futbolistas y en sus virtudes. En este sentido, Manuel Vidal cree que comparar el fútbol masculino y el femenino es injusto, porque este lleva menos tiempo de desarrollo y crecimiento.
Puede decirse, así, que se trata de una moda juvenil. Fomentada por la Federación de Castilla y León de Fútbol desde hace 15 años con una escuela con una salud de hierro.
En repetidas veces Ronaldo Nazário, presidente del Real Valladolid, y David Espinar, su mano derecha, han hablado del interés de crear una sección femenina cuando esté construida la ciudad deportiva. La entidad blanquivioleta es una de las pocas que no cuentan con ella, lo que para el director de la escuela de la FCYLF es «una espinita clavada». Su primera etapa dentro del fútbol femenino fue poco fructífera y nada duradera, lo hizo con un plantel del que surgieron futbolistas que luego siguieron su recorrido en categorías altas, pero no por el Pucela. Esta vez pretende arrancar con una cantera, algo que Manuel Vidal considera que es necesario. «Aunque supondría un trabajo muy duro y a años vista, su coste no sería tan alto como comprar una plaza para empezar arriba. Para las niñas de Castilla y León sería un gran estímulo que existiera un Real Valladolid que creyera en jugar en lo más alto con jugadoras de la región», valora Vidal.
A día de hoy más de una docena de técnicos trabajan cada dos fines de semana con cerca de un centenar de chicas de la comunidad, que bien podrían encontrar continuidad con un referente importante, y que no vendría a desdeñar el trabajo que se está haciendo ya en los clubes que compiten con equipos exclusivos de niñas.
La escuela federativa de 'futfem' es un reflejo en tanto en cuanto sus técnicos se vuelcan con las chicas y el contexto es femenino, no mixto, como sucede en algunas categorías. Algo así podría suceder –y es deseo de muchos– que ocurra en ese otro entorno teñido de blanquivioleta. Y es que soñar con la Champions está permitido. También en femenino.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.