El Recoletas Atlético planta cara al campeón

El portero del Recoletas, Forns, estuvo muy atinado al comienzo del duelo. Sus intervenciones estuvieron acompañadas de los tantos de Pisonero y de los hermanos Martínez para aceptar el duelo de golpes y goles propiciado por un Barcelona incapaz, hasta ese momento, de elevar sus revoluciones. Todo ello fue bajo un valiente correcalles en el que ni siquiera un tanto de siete metros a cargo de Richardson amilanó a un Atlético Valladolid muy correoso y motivado sobre la pista (10-8, min. 15).

La estrategia del entrenador David Pisonero fue tutear al coloso azulgrana mientras durase la gasolina. Esa energía ofreció incluso la posibilidad de posesión para situarse los visitantes por delante en el marcador con un lanzamiento errado de De Toledo que encontró réplica en el látigo de Richardson (12-11, min. 22). El lateral francés, con seis dianas, fue el jugador más valioso de la primera parte.

Solo en los últimos compases de la misma titubearon algo las piernas de los jugadores de la formación azulona, después de varias pérdidas casi consecutivas que propiciaron un demoledor 8-0. De esa secuencia fue casi imposible reponerse a la vuelta del descanso. De muy poco sirvieron las buenas intenciones pucelanas y los dos goles iniciales de los hermanos Martínez para recortar una brecha en aumento (19-13, min. 33). Buena culpa de ello la tuvo el látigo de Richardson, incontestable en los lanzamientos lejanos y, además, máximo anotador del encuentro con 11 dianas, más de la mitad de penalti.

Su capacidad para sortear murallas defensivas desarboló a un bloque que intentó no saltar sobre el lanzador para evitar la conexión con el pivote de los jugadores del conjunto azulgrana. Esa propuesta dio réditos en muchas fases del encuentro, pero fue suficiente para reducir la desventaja de cinco dianas. Pérez de Vargas abortó cualquier conato de revuelta vallisoletana. Del resto del cometido se encargó Richardson, bien secundado en tareas ofensivas por N´Guessan y Carlsbogard, eliminando así cualquier atisbo de suspense en una película de final conocido por todos aunque faltó por ver el calado de la última escena.

Fueron, en todo caso, 60 minutos de la undécima jornada de la Liga Asobal que dejaron para la posteridad la imagen de un Recoletas Atlético Valladolid valiente y competitivo que incluso se dio el gustazo de terminar el partido con un excelente sabor de boca merced a un parcial 3-8 cimentado sobre el protagonismo de los hermanos Álvaro y Miguel Martínez, extraordinarios durante toda el encuentro con nueve y goles respectivamente, siendo los máximos anotadores del Recoletas Atlético Valladolid, situado por la zona media-alta de la clasificación, que el próximo domingo a mediodía recibirá al Bada Huesca, penúltimo de la tabla, en el pabellón Huerta del Rey.