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Pablo Herrero supera a un defensor leonés. Rodrigo Jiménez
Balonmano

El recital del Ademar supera a un desangelado Recoletas

El Atlético Valladolid despide ante los suyos 2022 con una derrota provocada por su desacierto tanto en defensa como en ataque

Víctor Borda

Valladolid

Domingo, 4 de diciembre 2022, 22:17

El Recoletas Atlético Valladolid tuvo una mala experiencia en su despedida del 2022 en Huerta del Rey. Se vio superado por un Ademar excelso y castigado por su falta de acierto y la fragilidad defensiva que mostró. Intentó competir, pero no dio la talla siempre ... a merced, excepto en el arranque de partido, de los pupilos de Manolo Cadenas. Esta derrota, más dolorosa que otras por una rivalidad exacerbada en el caso de algún jugador del cuadro leonés, no empaña la buena primera vuelta que ha realizado el equipo pese a todos los inconvenientes a los que ha tenido que enfrentarse el plantel entrenado por David Pisonero. El Ademar fue superior y poco hay que decir a eso. Estuvo mejor en ataque y defensa que los locales, además de que su portería aportó bastantes más paradas que la vallisoletana. Quizá se pueda achacar también a que las fuerzas, después del sobresfuerzo que ha venido realizando por las bajas que arrastra la plantilla, están justas. Tras un mes sin derrotas, diciembre llega con una. Solo queda la visita del sábado a Granollers para acabar una primera vuelta más que notable y sobre todo recuperar fuerzas y efectivos.

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Recoletas

Lamariano (4 paradas), Pedro Martínez, Rosell (2), D'Antino (5, 4p), Miguel Camino (2), Toledo (1) -equipo inicial-, Méndez (10, 4p), Herrero (1), Dimitrioski, Freitas (2), Álvaro Martínez (2) y César Pérez.

30

-

37

Ademar

Barkhordari (12 paradas, 1 gol), Casqueiro (1), Castro (6, 2p), Boskos (2), David Fernández (6), Antonio Martínez (11, 4p), Santista (2) -equipo inicial-, Milosavljevic, Deividas Virbauskas (2), Zanas Virbauskas, Jin-Young (1), Mota (1) y Papantopoulos (2 paradas, 1 gol).

  • Marcador cada cinco minutos 3-2, 4-5, 6-8, 9-12, 12-15, 14-17 (descanso); 16-10, 18-23, 22-27, 24-30, 27-35 y 30-37.

  • Árbitros Macías de Paz y Ruiz Vergara. Excluyeron a los locales Miguel Camino, Rosell (2), Herrero y Dimitrievski por parte local, y a Mota, Santista, Zanas Virbauskas y Milosalvjevic (2).

  • Incidencias Partido correspondiente a la decimocuarta de la Liga Plenitude Asobal disputado ante más de dos mil espectadores en Huerta del Rey. En los prolegómenos del partido se homenajeó a la selección española de balonmano en silla de ruedas. En el descanso se realizó la tradicional lluvia de peluches que se celebra antes de Navidad.

Otro aspecto en el que hay que incidir es en el arbitraje, profundamente anticasero. Sospechoso que esta semana Cadenas cargase contra los colegiados y que afirmase que perjudican a su equipo para que los dos árbitros apliquen un criterio muy diferente sobre la pista. Ni en eso tuvo suerte el cuadro vallisoletano.

Pisonero salió con todo, incluido Toledo, después de varias semanas alejado de la pistas por un problema en el pie. Era la despedida del año en Huerta del Rey. Y el Recoletas comenzó al máximo. Bien en defensa y efectivo en ataque. En menos de cuatro minutos ganaba 3-0, lo que provocó el tiempo muerto de Manolo Cadenas. Casi cinco minutos le costó a Ademar estrenar su casillero. Ayudado por los errores en ataque locales, los leoneses devolvieron un parcial de 0-5 que les les daba la delantera por primer vez en el partido. El tiempo muerto había resucitado a los visitantes.

Tanto cambió el decorado que los leoneses se fueron con un peligroso 4-7 que provocó ahora el tiempo muerto de Pisonero cuando aún no se había llegado al cuarto de hora. El técnico local optó por atacar con siete hombres. Le permitió recortar, aunque se encontró con un acertado Barkhordari bajo palos. Y los leoneses se fueron de nuevo de cuatro tantos. El ataque en superioridad no había funcionado. La verdad es que Pisonero probó de todo durante todo el encuentro, pero con escaso éxito. La defensa local no estaba en su mejor momento. Ademar conseguía goles de manera muy fácil.

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Los vallisoletanos llegaron a colocarse a dos goles, pero el cuadro dirigido por Manolo Cadenas no tenía mayores problemas para mantenerse arriba en el marcador. Con 14-17 se llegaba al descanso y al inicio de la tradicional lluvia de peluches.

Las cosas se complicaron más al inicio de la segunda parte. El poco acierto y de nuevo el portero iraní provocaron que los hombres de Manolo Cadenas se fuesen de seis goles, la máxima renta en el encuentro hasta ese momento. La efectividad leonesa dominaba el choque. El Recoletas quería, pero desde luego no podía. Lagunas de concentración que costaron encajar tantos.

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El partido se endureció con el paso de los minutos. Acciones muy feas, sobre todo una de Milosavljevic sobre Toledo merecedora de cartulina roja que la pareja arbitral dejó en solo dos minutos. La renta leonesa se mantenía entre los cuatro y los siete goles. El partido estaba resuelto a falta de diez minutos para el final. Castro y David Fernández atacaban con facilidad el 4:2 de los locales.

Pisonero volvió al siete contra seis, pero los visitantes llegaron incluso a su máxima diferencia con ocho goles. La defensa leonesa estaba más activada y eso sumado a la falta de acierto de los lanzadores locales impidió incluso que los vallisoletanos pudieran maquillar el resultado. Mucho Ademar para un versión light del Atlético Valladolid. El Recoletas no había encontrado el camino frente a un Ademar que reinó en Huerta con un máster dirigido por Juan Castro y David Fernández, con la aportación del excelso finalizador que es Antonio Martínez.

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