Punto de gloria para el BM Nava

El bloque navero, muy acertado en los lanzamientos desde nueve metros, cobró ligeras ventajas en el inicio (2-3, min. 5). Silva fue el principal encargado de atacar a un Granollers que remontó pronto (6-5, min. 10). El conjunto local consiguió dañar al Viveros Herol por dentro, con un Salinas en estado de gracia y el poderío de Antonio García. La peor noticia de los primeros compases, por si ya hubiese pocas ausencias, fue la lesión del pivote Andrés Alonso en los dedos. El jugador tuvo que abandonar la pista durante unos minutos.

El férreo 6:0 de Nava incomodó a los anfitriones, pero la diferencia de calidad se hizo notar. Tres zarpazos de Sergi Franco hicieron pasar del 6-7 al 9-7 en un abrir y cerrar de ojos (min. 14). Adrià Martínez, al contraataque, puso la máxima para Fraikin (10-7, min. 15) y obligó al cuadro visitante a parar el partido por primera vez. A más de un gol por minuto y sin noticias de los porteros, el alto ritmo del duelo pareció venirle mejor a la escuadra vallesana. Los pupilos de Zupo Equisoain demostraron que también saben correr, aunque sus errores ante la meta rival resultaron duramente castigados (13-10, min. 20).

Granollers pareció estabilizarse en la ventaja de tres tantos, pero Nava vivió mejor en el fango de las exclusiones y el cinco para cinco. Una gran parada de Patotski, transparente en el arranque, y un notable lanzamiento de Rodrigo Pérez Arce colocaron a los visitantes a solo un gol (14-13, min. 23). La aportación de Simenas también estaba siendo decisiva. El propio Rodrigo Pérez, especialista desde los siete metros, igualó la cita de penalti (14-14, min. 24). El equipo segoviano iba de menos a más, pero se desfondó ligeramente en los últimos compases. El 17-15 con el que el encuentro se marchó al descanso, aún así, no parecía una brecha excesiva de cara a la segunda parte. Pero el Viveros Herol no volvió bien del paso por los vestuarios. Gassama, al contragolpe, y Chema Márquez, con un lanzamiento ante el que Patotski pudo hacer más, llevaron cuatro arriba al Fraikin Granollers, su máxima (19-15, min. 34). El exceso de revoluciones frenó al cuadro de Zupo en ataque, que también se topó con un Pol Sastre gigante bajo los palos. Pese a todo, Nava se resistía a perder comba y se mantuvo vivo en el partido (21-18, min. 38). La magia de Pérez Arce tuvo mucho que ver. Varios errores en la toma de decisiones volvieron a condenar a los visitantes, que se vieron cinco abajo a 20 minutos del final (23-18).

La gran aparición del segundo acto fue la de un Chema Márquez imparable. La competencia se la hacía Rodrigo Pérez, que volvió a acercar al equipo navero a solo dos goles de distancia en el luminoso (25-23, min. 34). La escuadra foránea se colocó a uno gracias a una diana al contragolpe del recuperado Andrés Alonso (25-24, min. 35). Pura intermitencia. El cuarto de hora final entrañaba, básicamente, dos complejidades: frenar al poderoso Fraikin y resistir al cansancio que ya comenzaba a asomar en algunas piernas. Un contragolpe perfectamente ejecutado por D'Antino, tras una brillante intervención de Patotski, empató el duelo (26-26, min. 38). La fase candente del choque estuvo repleta de emoción. Un parcial de 3-0 a favor de Granollers pareció poner tierra de por medio, pero nada más lejos de la realidad.

La cita se convirtió en un toma y daca sobre el que Nava supo navegar (30-29, min. 44). Alonso, a falta de cuatro minutos, puso la tablas (30-30). Adrià Martínez anotó desde nueve metros y Gassama amplió la renta local a la contra (32-30), pero ni así tiró Nava la toalla. Herranz y Mota, este a falta de solo trece segundos, establecieron un empate que sabe a gloria.