El Nava sufre hasta el último segundo para rematar a un Burgos peleón

Por si el Nava necesitara un recordatorio de las virtudes de su rival, el Burgos las puso pronto sobre la mesa: contragolpe y contragol, su receta para competir. En menos de un minuto, 2-1, la última ventaja local del primer acto. Porque el Nava replicó con su arma maestra: el lanzamiento exterior. Con Moyano y Prokop estrenando sus cuentas, su equipo lideraba el intercambio de goles hasta la ruptura.

La pudo protagonizar el Burgos, que propició un correcalles, pero encadenó fallos en seis metros. En medio minuto, dos contras locales terminaban sin premio, para alegría del Nava, que olió sangre y castigó la misericordia de su rival. Carró marcó un gol de mucho mérito, ganando la posición al exnavero Andrés Alonso con un giro sutil antes de definir en seis metros. Moyano subió la apuesta con un latigazo cruzado a la escuadra que hizo saltar los radares. Los ataques locales eran precipitados, como un tiro de cadera de Sako ante una defensa bien plantada, así que Smetanka puso el +3 (5-8) y obligó a Nacho González, otro ex del Nava, a parar el partido.

La herida todavía se abriría un poco más tras el parón con una incursión de Prokop por el carril centras tras una arrancada imponente, pero el Burgos limitó la amenaza exterior y volvió al partido. Karlov, el pichichi de la categoría, rompió el parcial de 0-4 con un par de goles –el segundo lo desvió Nico López– y redujo la brecha. El Nava empezaba a precipitarse, con un intento de transición fallido de Carró y una falta en ataque de Moyano.

El partido entró entonces en una sucesión de exclusiones –parecía imposible jugar seis contra seis– que dio oportunidades a ambos de asestar un golpe. El Nava desaprovechó la primera con un penalti fallado por Marugán –el Burgos ganó el parcial en inferioridad– pero canjeó la segunda con un contragolpe de Casares y con un golazo de Moyano a puerta vacía. Su equipo recuperaba su máxima renta (9-13), pero el Burgos replicó con la misma moneda: dos goles de Ibrahim desde su portería ante la desguarnecida meta segoviana devolvían el empate al marcador.

Ya antes de que el duelo se marchara 15-15 al descanso, Senovilla paró el encuentro enfadado por la falta de intensidad de los suyos: «Ellos tienen ganas de ganar, vosotros queréis regalar». El paso por vestuarios no arregló las cosas para un Nava que cedió tres goles en apenas dos minutos, desde el inicial de Lander Simón, con exclusión de Lodos de por medio, al de Alegrea a puerta vacía o el enésimo de Karlov. El 18-15 culminaba un parcial de 9-2 de los locales.

Los mejores jugadores están para los peores momentos y el tridente navero apagó el incendio. La reacción empezó con Smetanka, que anotó un buen gol y forzó un penalti. Tras los fallos de Marugán y Pérez, Moyano solventó la papeleta desde siete metros y destapó el tarro de las esencias con tres goles, cada cual más imponente. El Burgos volvía a fallar –Alegre se tapaba la cara tras no encontrar portería– y Prokop ponía su granito de arena a un parcial de 6-1. Senovilla, que tenía la tarjeta lista para parar el partido minutos atrás, veía como su homónimo era quien gastaba el tiempo muerto (19-21).

El Nava llegó por delante al tramo final, pero sufrió un contratiempo con la roja a Lodos tras su tercera exclusión en un agarrón con el peleón Rubén Fernández, que batió a Patotski en el siguiente lance. El Burgos empataba el partido aprovechando la meta vacía de los segovianos en inferioridad; el portero suplente, Fuentes, también tiene gol. Prokop, el cuarto lanzador de siete metros, dio un respiro a los suyos con un penalti clave. Ayudó la exclusión de Tamayo por golpear con el balón en la cara a Patotski y el ejercicio de escapismo de Smetanka, que se coló entre tres rivales y puso de nuevo el +2. Otro obstáculo vencido.

No fue el último: ell Burgos agotó todas sus vidas. Dani Pérez tuvo el +3 a dos minutos del final, pero Ibrahim lo evitó. Patotski paró el siguiente ataque, pero Rubén Fernández redujo el déficit a uno con más de un minuto por jugar. Respondió Smetanka con un tiro en carrera, pero Karlov volvió a recortar con su undécimo gol y el eslovaco tuvo que asistir a Pérez para que resolviera la contienda mientras sonaba la bocina.

El último inquilino del grupo de cara al ascenso está en duda tras la victoria del Unión Financiera ante Novás. Los asturianos, quintos, están a un punto de Villa de Aranda, al que visitan la próxima jornada, y Burgos, que cierra la fase ante los dos últimos. De quién entre dependerá el número de puntos con el que cada equipo inicie la fase de ascenso.