Filipe Mota y Tsanaxidis se despiden de un Nava condicionado por el cupo seleccionable

En la tarde de ayer, las redes sociales oficiales anunciaban la salida de tres jugadores, aunque la de uno de ellos ya era conocida pues la había anunciado dos días después del descenso. Haris Pleh ya hizo oficial por su cuenta su marcha al balonmano israelí, cosa que no habían hecho ni Filipe Mota, ni Chrysanthos Tsanaxidis; los otros dos que se despedían del equipo. El central portugués es el que más tiempo llevaba en el club, con dos temporadas tras haber sido fichado para el equipo que montó Diego Dorado. El jugador griego, muy acoplado a la vida en Nava y con mucha relación con los jugadores del pueblo, también tenía ofertas superiores.

Son tres nombres a los que en los próximos días se irán sumando algunos más, sin duda. Con nombres determinados, se está intentando mantener la vinculación a través de una cesión, pero el club se está encontrando el problema de que las plantillas prácticamente están diseñadas desde el mes de marzo. Eso sí, hay un jugador que tiene contrato largo, que es joven y del que se piensa que puede tener una evolución todavía mayor en Plata que la que se ha visto en Asobal. Se trata de Tomas Smetanka, un central joven y de una calidad extrema alrededor del cual se puede perfectamente crear un equipo. Aunque las dificultades para ello estén siendo mayores de las que se esperaban en un primer momento todos en el club navero.