El Caja Rural Aula vuelve a la liga con una misión casi imposible

Miguel Ángel Peñas indicó que él y su equipo tenían ya «ganas de competir de nuevo. Volvemos en una situación complicada al tener que enfrentarnos consecutivamente a Bera Bera y Rocasa. Lo bueno que tiene esto es que no sabemos cómo va a volver ningún equipo después del parón. Vamos un poco a la aventura. Es una incógnita cómo vamos a responder frente a Bera Bera».

Destacó el nivel de la plantilla donostiarra y puso el foco en la internacional Paula Arcos, «que ha sido la jugadora más destacada en la selección y que se encuentra a un gran nivel. Jugamos contra un superequipo. En su casa resulta muy complicada sacar algo. Nuestro equipo lo está haciendo bien en casa, pero no fuera. Eso supone un hándicap».

«Es muy difícil ganar allí», prosiguió. «Soy realista. Me gustaría competir por dos razones. La primera porque no te saquen del partido y la segunda porque necesitamos más nivel fuera de casa».

Peñas adelantó que la portera Carmen Sanz ya está recuperada de la lesión que le ha obligado a jugar con molestias. En principio podrá contar con todos sus efectivos para enfrentarse al conjunto vasco. Por cierto, Lorena Téllez, que fue madre hace unos meses, comenzará de nuevo a entrenar el próximo lunes junto a sus compañeras.

El entrenador del Aula afirmó que el objetivo es acabar esta primera vuelta con ocho puntos o diez a ser posible para sumar otros cinco o seis en la segunda, donde visitan Huerta del Rey la mayoría de los equipos que están en la parte baja, y con ello escapar del grupo de clubes que van a tener que pugnar por evitar el descenso. También subrayó que firmaría ya renovar a todas las jugadoras que tiene esta campaña con vistas a la siguiente, «porque seguro que el equipo tendría una evolución muy importante».

Por cierto, Miguel Ángel Peñas no podrá sentarse en el banquillo al haber sido sancionado con tres encuentros tras recoger el delegado federativo en el acta que había insultado a un colegiado en el partido en casa frente al Atlético Guardés, insulto que al parecer solo escuchó el delegado.