El Aula pierde su condición de invicto en los minutos finales

El partido comenzó con las defensas echándose un pulso, demostrando por qué son dos de las retaguardias más fiables de la Liga Guerreras y provocando que el marcador del pabellón Hermanos Indurain caminara a cámara lenta. Intentaba el Caja Rural Aula Valladolid defender y correr, pero el repliegue navarro en la primera mitad rozó el sobresaliente.

La fortaleza de Irene Botella -la mejor de las vallisoletanas- y la inteligencia de Jimena Laguna permitieron a las visitantes coger las primeras ventajas, pero no romper el marcador ante un concentrado Beti-Onak que con el paso de los minutos comenzó a ampararse más en una Lyndie Tchaptchet que se hacía grande en los dos lados de la pista. Un papel que imitaba a la perfección en al otro lado del espejo María O´Mullony, líder de una racha que situaba el 5-9 y que obligaba a Miguel Etxeberría a pedir tiempo muerto.

La pausa pedida por el entrenador navaro fue mano de santo para las locales, que aprovecharon la exclusión de Irene Botella para devolver el pulso al partido y dejar en salida nula la escapada vallisoletana. Con una serenidad impropia para un novato en la categoría consiguieron devolver el empate al luminoso (10-10). Un toque de atención escuchado por las vallisoletanas, que volvieron a apretar tuercas para irse mandando por la mínima al descanso (11-12).

El segundo periodo comenzó en la misma tónica. Defensas bien ajustadas, amparadas por la finura de Menchu Sanz y Olaia Luzuriaga bajo palos, y con el Caja Rural Aula Valladolid moviéndose cómodo en las distancias cortas y esperando la oportunidad para meter la tijera en el marcador y abrir un boquete. Un escenario que no contemplaba un aguerrido Beti-Onak que una y otra vez lograba tapar los huecos que abrían las vallisoletanas e incluso ponerse por delante en el marcador (18-17), una imagen que no se veía en el pabellón navarro desde el primer minuto de partido y que accionó un click que activó la confianza local para los minutos finales.

El guion pasó del suspense a drama para las vallisoletanas cuando vieron al Beti-Onak dos arriba a cinco minutos del final. Frenadas por Olaia y desesperadas por el ataque verdillo, el desenlace se encaminaba hacia la primera derrota del curso, la cual certificó Macarena Sans con un gol que cerró el marcador con el 25-23 final que dibuja la primera derrota del curso en el casillero de un Caja Rural Aula Valladolid que pierde su condición de invicto.