El Aula deberá remontar el sábado para seguir en la Copa de la Reina

Una vez despejada la incertidumbre sobre la celebración del primer partido de la eliminatoria, el equipo pucelano tomó las riendas del mismo con Jimena Laguna muy activa en el eje. La defensa 6:0 que planteó el entrenador local dificultó la circulación del balón desde una primera línea muy intensa en los marcajes. Reaccionó el Conservas Orbe Porriño acudiendo a un intercambio de golpes que introdujo un ritmo frenético. En ese contexto de falta de control, mejoró el siete porriñés y aprovechó para llegar a las tablas después de un excelente lanzamiento de Mónica Oliveira (4-4, min. 7).

Sobre una defensa muy rocosa, pese a jugar hundida en la línea de 6 metros, creció el equipo de Isma Martínez gracias a los goles de Soraia Lopes. La extremo lusa aprovechó su velocidad para brillar en un partido hecho a su medida en el que, además, tuvo oportunidad de entrenar su disparo desde siete metros. Suyo fue el tanto que colocó la primera diferencia importante con tres goles de renta a falta de diez minutos para el paso por vestuarios (12-9, min. 20).

Sergio Escudero, ayer sustituto del convaleciente Miguel Ángel Peñas, buscó en el banquillo soluciones para el cortocircuito ofensivo de un equipo que dependió en exceso de Cristina Cifuentes a la hora de romper la muralla local. Fue en ese punto cuando Lorena Téllez ajustó su mirilla y ejerció, una vez más, de francotiradora de lujo. Se multiplicaron las amenazas ofensivas del plantel visitante y llegaron sus mejores minutos, con un parcial 1-5 que posibilitó entrar en vestuarios con ventaja mínima en el marcador.

El mismo decorado se extendió al inicio de una segunda mitad donde el Aula Alimentos de Valladolid puso velocidad de crucero y decidió ir a por la victoria. También fue de ayuda el cambio de rumbo de la pareja arbitral, muy permisiva con el bloque defensivo anfitión durante los primeros parciales de juego.

En un mínimo colchón de renta se movió el equipo de Sergio Escudero hasta que las imprecisiones hicieron mella en sus jugadoras. La falta de ritmo provocada por la situación sanitaria que ha afectado al equipo de Valladolid castigó a un plantel que sufrió una nueva desconexión al paso por el ecuador de la segunda mitad. Con Anthia Espiñeira y Soraia Lopes castigando a la contra, el Porriño volvió a mandar en el marcador después de un tanto de Andrea Amarilla (23-22, min. 47).

Fue el punto de inflexión para una escuadra local que cambió la tendencia con un juego más intenso con modificaciones en el entramado defensivo. Adelantó la defensa Isma Martínez para impedir una circulación limpia de balón y bloquear el juego con la pivote en seis metros. Una vez cerrada la vía de entrada principal para el cuaadro vallisoletano, comenzaron los problemas y las pérdidas de balón en el tramo decisivo del encuentro. La única buena noticia del lado visitante llegó con el acierto de Lorena Téllez, muy inspirada cuando sus compañeras comenzaron a flaquear en el esfuerzo.

El BM Porriño manejó con brazo firme el balón para administrar pausa en un partido muy controlado pese a disponer de una renta mínima en el marcador (27-26, min. 56). Todo cambió en los últimos instantes con un parcial 3-1 que complica mucho las cosas para la vuelta (sábado, 19.00 horas) después del enésimo apagón sufrido por un equipo con claros síntomas de debilidad.