El líder Atlético marca las diferencias

Huerta del Rey vuelve a ser el templo del balonmano por ambiente y por el juego del Atlético Valladolid Recoletas. Con más de 1.500 espectadores en las gradas, el nuevo derbi regional ofreció todo un espectáculo de tensión, emoción y excelentes jugadas. La lástima es que la enorme diferencia, hoy por hoy, entre el Atlético Valladolid y el Nava se puso en evidencia demasiado pronto, en apenas quince minutos.

Los segovianos tiene una primera línea con jugadores muy polivalentes, rápidos, muy hábiles en el pase y resolutivos. Mientras les duró el fuelle, plantaron cara a un Atlético al que le costó adaptarse en defensa al estilo del Nava. Pero en cuanto el conjunto de Nacho González adquirió la velocidad de crucero, las ventajas comenzaron a subir como la espuma. Con un Diego Camino excelso en ataque, con un recital de movimientos, pases y también goles, los vallisoletanos dibujaban con tiralíneas sus jugadas y cada ofensiva se convertía en un gol de hechura diferente. Un par de paradas de Javi Díaz sirvieron para que, a los doce minutos, se rompiese la igualdad (8-6) y después, un par de buenas defensas, obligaron a Álvaro Senovilla a parar el partido, a los quince minutos, porque el marcador se había disparado hasta un 10-6 imparable.

Con todo, el Nava intentó mantenerse en el partido y aprovechando una exclusión local redujo mínimamente las diferencias. El Atlético comenzó las rotaciones, pero mantuvo el fuerte ritmo, mientras el Nava comenzaba ahogarse sin repuestos suficientes. Además, la exclusión de Carlos Villagrán fue la puntilla para los segovianos. Diez minutos estuvo el Nava sin marcar y el electrónico reflejó al descanso un elocuente 20-14.

El Atlético había dejado patente en estos primeros treinta minutos todas las virtudes que le han llevado a liderar la División de Honor Plata. El partido estaba visto para sentencia en el descanso, a pesar de que los segovianos no dieron nunca su brazo a torcer. El Atlético, sabedor de su superioridad, se limitó a conservar ventajas y de hecho, en esta segunda mitad, el hombre más destacado fue el guardameta César, con nada menos que trece paradas.

El juego bajó de nivel, tanto como la emoción y tensión en el choque. Nacho González incluso probó una defensa 5-1 con el joven Yoel como avanzado. Ambos equipos solo esperaban el final de un partido que estaba decantado antes de comenzar entre el líder Atlético Valladolid Recoletas y un Nava que lucha por eludir el descenso.