El UEMC sigue en racha

Duelo entre dos equipos de parte noble de la clasificación en la LEB Oro. Los vallisoletanos con cuatro triunfos consecutivos, incluido el último en la pista del hasta ese momento líder, el Estudiantes. Los donostiarras, con un triunfo más que sus rivales en el casillero. Todos los ingredientes para un partidazo.

Intensidad en cada acción. El UEMC logró una pequeña renta inicial. Nwogbo estaba acertado cara al aro rival. Buen arranque local, que se fue a un 15-6 sin haberse llegado aún al ecuador del primer cuarto. Llegó la segunda falta de Schmidt, que se fue al banco por precaución. El Pucela Basket se atascó un poco en ataque, lo que aprovechó Gipuzkoa para recortar en el electrónico. Se colocó a dos puntos. Barcello era su mejor hombre en cancha. Desacierto en el tiro local, que se salvaba por su rebote ofensivo. Schmidt regresó para la última posesión y acabó el cuarto con un triple del escolta, que dejaba el marcador en 22-17 al final de los diez primeros minutos de juego.

La renta blanquivioleta creció hasta los diez puntos en el arranque del segundo capítulo del choque (31-21), lo que provocó el tiempo muerto del técnico visitante. El UEMC se gustaba, también en defensa. Nwogbo seguía con su exhibición. Gipuzkoa redujo diferencias, pero fue un espejismo. El UEMC volvió a poner la diferencia en diez puntos (38-28, min. 17) e incluso la superó. Con 44-33 se llegaba al descanso. Dejar a los visitantes en 33 puntos era toda una declaración de intenciones.

Del vestuario, el UEMC retornó algo despistado, lo que aprovechó su rival para acercarse en el marcador. Con dos bases en pista la cosa no carburaba. Regresó Schmidt a pista para reflotar la nave. Barcello cogió las riendas del ataque vasco. Y Gipuzkoa Basket se colocó a solo tres puntos del equipo vallisoletano (47-44, min, 25) , lo que provocó el tiempo muerto de Paco García. Barcello había metido la directa. Igualó con un triple.

Gipuzkoa Basket cometió muy pronto las cinco personales, muestra de que había subido su nivel atrás. El UEMC se mantenía por delante en el electrónico a duras penas. Logró irse cinco puntos arriba al final de los primeros treinta minutos de encuentro (56-51). Para nada había tenido de la cara el Pucela Basket del primer tiempo.

Las espadas estaban en todo lo alto. Las defensas se imponían a los ataques. Barcello era un auténtica amenaza para los locales. Schmidt con un triple muy alejado dio oxígeno al Pucela Basket. Restaban tres minutos y medio, y el UEMC mandaba 65-58. Otro triple de Jaime Fernández mantenía la renta, pero Barcello estaba siempre con la escopeta cargada. Los últimos instantes fueron un cúmulo de errores de uno y otro equipo. Un error de Schmidt puso a los vascos a solo dos puntos. En la jugada siguiente el escolta se sacó la espineta con un 2+1 que resolvió el choque (70-65). Restaban 16 segundos. El equipo visitante erró su tiro y de la Fuente anotó un tiro libre. La séptima victoria ya era una realidad.