El UEMC Real Valladolid Baloncesto progresa adecuadamente

Resulta complicado predecir qué será del UEMC Real Valladolid Baloncesto a medida que avance la temporada, pero sí hay dos cualidades que serán constantes en el equipo son el compromiso y la solidaridad. El partido que servía para que los aficionados vallisoletanos volvieran a ver a su equipo en Pisuerga, tercero de la pretemporada, mostró las carencias propias de la tercera semana de preparación, que es en la que se encuentran los de Roberto González, a tres para inicial la fase regular de la LEB cuando reciban al Granada el día 8 de octubre.

El orden y la paciencia se impusieron a los errores groseros en las jugadas de ataque de los locales, con pinceladas de lo que será el equipo este año: defensa tratando de dejar al rival por debajo de los 70 puntos, ausencia de individualidades y protagonismos innecesarios y trabajo colectivo. Si cuando se gana es mérito del equipo, cuando haya derrotas también serán del grupo entero.

El partido dejó la derrota del UEMC RV tras dominarlo 37 minutos con buenos mimbres, sin escatimar esfuerzos en los jugadores disponibles. En este equipo y esta temporada no habrá disculpas ni excusas. Y la empresa de ayer no era fácil. Enfrente estaba el descendido, todopoderoso y favorito a la primera plaza y al ascenso directo. Y todo ello sin Pantzar, ni Juan García-Abril, ambos recuperándose de lesión, así como ni Pippen, del que se espera que esta semana pueda viajar desde USA hasta Valladolid. Estudiantes llegaba a Valladolid con menos rodaje y los de Jota Cuspinera lo acusaron hasta dos minutos de acierto y veteranía de Nacho Martín y Beirán cuando el partido agonizaba.

Wintering anotó los primeros 4 puntos (10 al descanso) del Real Valladolid, dejando sensaciones de jugador divertido, capaz de hacer diabluras en las penetraciones y los segundos finales de las posesiones. Por el minuto 6 la ventaja local ya era de 8 puntos (14-6), logrando los balones sueltos, con jugadores al suelo, buena actitud en el rebote defensivo y tratando de jugar con velocidad cuando la defensa de Estudiantes lo permitía.

Por el final del primer cuarto se pasó con un 20-13 que alcanzó su máxima ventaja en el minuto 19 (34-24). Roberto González había rotado ya a sus 10 jugadores, con titularidad para Íñigo Mayorga, la tercera de la pretemporada, y haciendo muchas cosas bien. Lo del abulense de la cantera morada no es casualidad, al igual que los minutos que aporta Guille Raposo en la dirección del juego. Al descanso la ventaja era cómoda (36-26).

El paso por el vestuario hizo reaccionar a los de Jota Cuspinera. La actitud defensiva fue distinta, apretando más atrás y mostrándose más duros. Del 42-31 del minuto 23 se pasó al 44-41 del 36 tras un parcial 2-10. Roberto González trató de reordenar las ideas de su equipo con un tiempo muerto. Minutos de descanso para Wintering, asfixiado por Varela y Dee, quien tuvo dos triples para empatar el partido pero falló en ambas acciones. Al final del tercer cuarto se mantenía la ventaja local (51-47).

Con Raposo en la dirección el Pucela se recuperó (56-47, min. 32). Cuspinera paró el partido ante el control de los de Roberto González. El choque entró en una fase de acumulación de tiros errados por unos y otros, típicos de la pretemporada y del estado físico de los jugadores. Apareció la veteranía con Nacho Martín y Beirán para poner arriba a Estudiantes a falta de dos minutos para el final (56-60), aprovechando las pocas acciones del partido en las que el UEMC Real Valladolid perdió el control del juego. Estudiantes aprovechó el cansancio de los locales para llevarse el partido por 61-64.

El miércoles en Oviedo nueva prueba para ver si este «grupo», como definió Roberto González en la previa, avanza en su transición hasta ser «equipo». Después llegará la Copa CyL en Valladolid el fin de semana anterior al inicio de la liga LEB.

El técnico morado se mostró satisfecho de la tercera prueba de su equipo en esta pretemporada, calificando el choque frente a Estudiantes como «positivo». La justificación la argumentó Roberto González en que «hacemos lo que hemos hablado en el vestuario antes de comenzar. Hemos demostrado nuestra identidad como equipo y eso ha quedado patente. Hermosa aguantando el buen nivel físico que pone Estudiantes por los jugadores que tiene, sobre todo hasta el descanso».

Estudiantes tuvo en el tercer cuarto «más intensidad si cabe e incluso más acierto y hemos aguantado hasta que hemos podido, a tres minutos del final, con aportación de todos los jugadores».

Dos minutos de errores en ataque del Real Valladolid en el tramo decisivo evitó que la victoria quedara en casa para el equipo que había dominado 37 minutos del choque. «Al final vas regulando todo lo que puedes para llevar el control, que no es nada fácil y llegas manteniendo la ventaja. Pero ahí aprietan, llega el acierto y los veteranos dicen que aquí están ellos, y ahí se nos ha ido el partido».

Raffington «más implicado no puede estar. Rebotea, se tira al suelo, lucha todos los balones y es parte muy importante de grupo que va empezando a ser equipo». Precisamente sobre esta cuestión, González destacó que «estamos en muy buen nivel de equipo, pero nos falta incorporar a jugadores que tienen que ser muy importantes, como Pantzar, Pippen y Juan. Tenemos que adaptar el sitio que no tienen ocupado, ahora por Mayorga y Raposo, que lo están haciendo de 10 pero su sitio no va a ser ese. Necesitamos más tiempo y estamos muy contentos. Wintering es muy importante pero cuando Pantzar este también será muy importante», y esa ausencia ayer la notó su equipo.

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