El UEMC mantiene su fortaleza en Pisuerga

El UEMC arrancó bien. Sólido atrás y corriendo cuando había ocasión. Eso le permitió irse a un 9-2 apenas a los dos minutos de juego. Llegaron los triples de Kovacevic y De la Fuente. Pero Castelló reaccionó para recortar, aunque los locales hacían daño desde más allá de la línea de 6,75. Belemene voló para anotar el canasta del partido. La renta vallisoletana volvió a engordar. El Real Valladolid se gustaba. Con 21-9 en el electrónico, Orenga pidió tiempo muerto. Los castellonenses estaban totalmente desconectados.

El tiempo muerto le sentó mejor al cuadro visitante. Los triples locales ya no entraban. Castelló acabó los primeros diez minutos de encuentro solo tres puntos por debajo (24-21). Los instantes finales del cuarto inicial se le habían atragantado a los hombres de Paco García.

Faner dio otra cara a su equipo. Tal es así que al inicio del segundo cuarto los visitantes mandaban por primera vez en el marcador (24-25). Al UEMC le costaba un mundo anotar. Malos tiros y malas decisiones. El TAU Castelló había pasado de dominado a dominador en pocos minutos. Paco García devolvió a pista a De la Fuente y Belemene. Castelló mandaba por 27-35. El Real Valladolid reaccionó. La defensa subió el listón y la grada también. Un parcial 9-0 puso de nuevo a los blanquivioletas por delante (36-35). Ahora era a Castelló al que le costaba un mundo encontrar el camino hacia la canasta rival. El equipo vallisoletano había logrado reaccionar y se iba al descanso por delante (38-35). Más de cinco minutos sin anotar había estado el cuadro entrenado por Juan Antonio Orenga. En el momento en el que los locales habían apretado atrás, habían recuperado la delantera en el marcador.

El UEMC calcó su salida del primer cuarto. Sólido atrás y cumplidor en ataque. Kovacevic, con un triple, llevó a los blanquivioletas hasta un 47-35 que provocó el precepetivo tiempo muerto del rival. El Real Valladolid volvía a gustarse. Eran ya más de ocho minutos sin anotar de los visitantes. Hook, por fin, rompió la paupérrima racha ofensiva de Castelló.

Kovavevic comenzó a anotar desde el perímetro. Una tras otro los triples del balcánico iban cayendo. La renta local creció hasta los 15 puntos (61-46, min. 29). Belemene volvió a levantar a la grada con un estratosférico tapón. Castelló logró que la diferencia menguase un poco hasta el 63-55

con el que se llegaba al final de tercer cuarto.

Restaban diez minutos para recuperar la sensación de ganar en casa. Esta vez, el cuadro visitante arrancó mejor con triple de Alvarado y contraataque de Alley, pero cinco puntos seguidos de Sergio de la Fuente volvieron a poner las cosas en su sitio. El capitán estaba 'on fire'.

Pero Castelló se encontraba listo para el esprint final. Se colocó a solo dos puntos (72-70, min. 34). Incluso llegó a igualar a 75. Menos de cinco minutos y todo por decidir.

Belemene volvió a pista con triple incluido. Cada balón era oro. Alvarado vio una técnica por protestar que supuso el 83-78 a dos minutos y medio para el final. Buenas defensas locales que agradeció el respetable. Castelló entraba cinco puntos abajo al último minuto. Pantzar con un robo y posterior contragolpe dejaba el partido decidido (88-80) a medio minuto para el final. Había costado, pero la vigésima victoria ya está en Valladolid. Al final, 92-82 para un equipo que sigue siendo muy solvente en casa.