El UEMC se agarra al sueño del 'play-off'

El partido se las traía. Un rival con una plantilla de campanillas, con mucha calidad y sobre todo mucho físico. Un adversario al que había que igualar a base de defensa y cerrando bien el rebote. Con Wintering al timón y anotando, el Real Valladolid Baloncesto fue mandando en el marcador hasta el 15-9 (min. 6). El Pucela Basket se gustaba. Mejor en ataque que en defensa. Pero el acierto se esfumó en el tramo final del primer cuarto y TAU Castelló recortó hasta el 17-14 con el que finalizaron los primeros diez minutos del choque. El público disfrutaba de lo lindo. Buenas sensaciones en un equipo que parece otro desde que cayó en manos de Paco García.

En el segundo cuarto, las defensas mejoraron y subieron la intensidad. Costaba un mundo anotar. El UEMC lo hacía desde la línea de personal. Sergio de la Fuente dio la máxima renta hasta el momento a su equipo (25-18, min. 16), lo que obligó a Toni Ten a pedir tiempo muerto para reflotar la nave. Pantzar era el principal estilete ofensivo de los locales, que llegaron a tener nueve puntos de renta (29-20), lo que provocó un nuevo tiempo de los visitantes, a los que les costaba leer la defensa vallisoletana y sus tiros no acertaban con la canasta. La diferencia incluso alcanzó los diez puntos, pero el ataque local comenzó a tener algún problemilla con la zona de Castelló.

Los instantes finales fueron peliagudos. Una falta que se inventó uno de los colegiados y técnica a Pantzar por protestar que generaron tres puntos con los que el marcador llegó al descanso con 37-31. El Pucela Basket había dejado a su rival en 31 puntos, un guarismo que apuntaba a un encuentro con pocos puntos como quería Paco García. Una pega, los últimos minutos del segundo cuarto habían sido lo peor de la primera mitad.

Geks volvió a pista con la mano caliente. Dos triples consecutivos del escolta local abrieron la brecha en un momento en que las defensas se mostraban intensas. Pippen llevó a los vallisoletanos a la máxima renta hasta el momento, doce puntos (45-33, min. 23). Nuevo tiempo muerto de Castelló, pero Wintering no cejaba en su empeño y el marcador engordó hasta un llamativo 48-33.

Los visitantes consiguieron menguar la diferencia para llegar al final de tercer cuarto con 60-51. El UEMC parecía tener controlado el partido, pero restaban diez minutos en los que se iba a vender todo el bacalao. El Real Valladolid Baloncesto había conseguido que TAU Castelló no se sintiera cómodo.

En el último cuarto se cronificaron los problemas en ataque. Un parcial de 0-6 de Alvarado, con triple incluido, despertó a su equipo. Con 63-59 (min. 35) se encendieron todas las alarmas. Tiempo muerto de Paco García. Quedaban más de cinco minutos y el partido entraba en su fase decisiva. Wintering cometía su cuarta personal y se iba al banquillo. Pippen mantenía la nave con sus puntos en la pintura. Un triple de De la Fuente devolvía una renta de nueve puntos a falta de más tres minutos para el final (70-61).

Dos triples consecutivos del capitán decidieron que la victoria se quedaba a orillas del Pisuerga. Duelo final de triples y regalo arbitral final al TAU Castelló, que logró mantener el average. Una pena el último lanzamiento de Pippen, que se salió de dentro.