Octavo triunfo del UEMC con sello Kovacevic

Las fuerzas se mostraban igualadas en los primeros compases del encuentro. Castelló no tenía mayores problemas para superar la defensa blanquivioleta. El cuadro visitante mandaba en el marcador, aunque las rentas no superaban los cuatro o cinco puntos. El UEMC había empezado con una marcha menos que su rival. Kovacevic salió al rescate desde más allá del 6,75. Una pequeña reacción que bastó para irse por delante hasta de seis puntos (25-19), resultado con le que iba a finalizar el primer cuarto. El Real Valladolid Baloncesto se había asentado con la entrada de la segunda unidad. El primer asalto se había resuelto a los puntos a favor del conjunto local.

El arranque del segundo cuarto no fue bueno. El UEMC perdió la efectividad de los instantes finales del primer cuarto hasta que otro triple de Kovacevic parecía hacer despertar a las huestes de Paco García (28-21, min. 13). Con 30-21, Orenga volvió a pedir tiempo muerto. El Pucela Basket había vuelto a la senda.

Kovacevic estaba desatado. Cinco puntos suyos dieron una renta de trece puntos (37-24, min. 16). El Real Valladolid movía bien el balón y encontraba buenas opciones de anotar. Puidet, siempre garra y entrega, se ganó el aplauso de la grada por recuperar un balón con la maña de los listos. La grada disfrutaba de lo lindo. Buenas defensas locales y buenas lecturas en ataque. Con todo ello, el equipo entrenado por Paco García se fue por delante al descanso (48-36).

Kovacevic comenzó el tercer cuarto de la manera en que había acabado la primera mitad, anotando desde el perímetro. El equipo blanquivioleta no tenía mayores problemas para mantener su diferencia en el electrónico. El alero esloveno lo metía todo. Ni las faltas personales lo paraban. La grada gritaba desatada «¡MVP. MVP!». Kovacevic llevó a los suyos a un renta de 18 puntos (60-42, min. 25), lo que provocó el consiguiente tiempo muerto de los visitantes. El UEMC, por medio del balcánico, había puesto la directa.

La fuente Kovacevic se secó de pronto. Sus triples no entraban y parecía que Castelló podía recortar. Pero no fue así. A los visitantes les costaba anotar y apareció Jaime Fernández en el bando vallisoletano para sumar puntos. El equipo local no tuvo mayores problemas para llegar al final de los primeros treinta minutos de juego con un cómodo 68-56. Amics había recortado algo la renta blanquivioleta en el tramo final de ese cuarto.

Los últimos diez minutos comenzaron con los dos equipos negados para anotar. Las defensas subieron intensidad. Cada punto ahora costaba el doble de esfuerzo. Amics Castelló bajó la diferencia a diez puntos (73-63, min.36), pero un triple de Mike Torres devolvió las cosas de nuevo a su sitio. Hubo una técnica al banquillo castellonense que aprovechó Kovacevic. El esloveno estaba lanzado. Otra canasta de él y más de gritos de ' MVP' de la afición local. El UEMC mandaba de 16 puntos a poco más de tres minutos y medio para el final (79-63). El encuentro fue languideciendo sin sobresaltos. Hacía muchos minutos que la suerte estaba decidida. Octava victoria del curso del UEMC, esta con un claro y rotundo sello Kovacevic.