Paco García da instrucciones a sus jugadores. RVB
Baloncesto

Un imparable Devin Schmidt reina en Cáceres

El UEMC Real Valladolid Baloncesto consigue la octava victoria consecutiva en el feudo extremeño

Clemente Ramos (ADG)

Cáceres

Viernes, 15 de diciembre 2023, 23:28

El UEMC Real Valladolid Baloncesto sigue de dulce. Encadena ya ocho triunfos el equipo de Paco García, que noqueó en Cáceres a un anfitrión que encadena seis derrotas y que, aunque no se rindió hasta el último instante, casi siempre fue a remolque del cuadro pucelano. Un majestuoso Schmidt, 36 puntos y 30 créditos de valoración, lideró una victoria sustentada en la superioridad en casi todas las facetas de una escuadra blanquivioleta que afianza su tercera plaza en la clasificación.

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Cáceres

Atencia (10), Gantt (11), Raitanen (7), Bonilla (13), Dikembe (7) -cinco inicial-, Cepukaitis (10), Carreño, Dani Rodríguez (5), Pablo Rodrigo (16) y Sigismonti.

79

-

87

UEMC

Costa (8), Schmidt (36), Belemene (6), De la Fuente (6) y Ngowbo (6) -quinteto inicial-, Jaime Fernández (2), García-Abril (5), Puidet (7), N`Guessan (7) y Kovacevic (4).

  • Parciales 23-21, 20-29 (43-50), 11-16 (54-66), 25-21 (69-77).

  • Árbitros García León e Ibáñez García (Colegio castellanomanchego) y García Crespo (Colegio andaluz).

  • Incidencias Multiusos Ciudad de Cáceres. 1.356 espectadores.

En un duelo con muchos viejos conocidos en ambos equipos, los dos conjuntos empezaron muy entonados y viendo aro con facilidad. Schmidt, demostrando que el partido de Logroño fue un borrón en una hoja de servicios casi intachable, anotó siete puntos en un primer cuarto en el que también brilló otro viejo conocido de la hinchada cacereña, Belemene, quien, con dos triples casi seguidos, situó la máxima ventaja para el UEMC (6-11). Costa, en ausencia de Mike Torres, dirigió con criterio al equipo pucelano y también aportó anotación.

El mexicano Bonilla (seis puntos y cinco rebotes en el primer cuarto) ayudó a desperezarse a un Cáceres que fue entonándose con el paso de los minutos, por lo que el equilibrio durante el acto inaugural fue una constante. Atencia y Dani Rodríguez lideraron la reacción del equipo cacereño en el tramo final del primer parcial y una canasta de Cepukaitis al iniciarse el segundo cuarto deparó la máxima renta del cuadro verdinegro (25-21), que suponía un parcial de 19-10, y que mantuvo el equipo de Roberto Blanco hasta que Schmidt decidió afinar la mirilla y anotar dos triples seguidos que devolvieron el mando a la escuadra vallisoletana (34-37). Puidet, que asumió funciones de base, anotó y asistió a N'Guessan para establecer una nueva renta máxima en el encuentro (36-42, min. 16). Gantt, otro que se medía a su antiguo club, atajó el intento de revuelta del cuadro blanquivioleta, aunque nuevamente Schmidt destapó el tarro de las esencias para liderar un nuevo estirón hasta los ocho puntos (38-46). Blanco paró el choque para buscar la reacción de sus pupilos. Sin embargo, un tiro libre y un triple de De la Fuente dispararon el resultado (40-50). Un triple no concedido a Kovacevic desde la esquina por pisar la línea puso fin al primer acto.

Schmidt volvió del descanso castigando a su exequipo con un nuevo triple y las canastas de Costa y Ngowbo volvieron a abrir un nuevo hueco (43-57). Otra vez fue Gantt, con un triple, el que trató de suturar la brecha. Pero Schmidt, insaciable, volvió a ver aro desde fuera del arco. Y otro enceste suyo mediado el tercer cuarto amenazó con romper el encuentro de manera definitiva (46-62). Trató de agarrarse el conjunto de Roberto Blanco al partido, defendiendo con más intensidad, con Dani Rodríguez tirando del carro, la colaboración de Raitanen y un siempre implicado Gantt. Cepukaitis, antes de cerrarse el cuarto, y Bonilla, ya dentro de los diez minutos finales, llegaron a poner el resultado a diez puntos, aunque no conseguía bajar el conjunto verdinegro de esa barrera psicológica. N'Guessan y Kovacevic anotaron bajo el aro y Roberto Blanco pidió un nuevo tiempo muerto (56-70, min. 32).

Empuje local

Pablo Rodrigo, que fue elevando sus prestaciones con el paso de los minutos, logró aproximar al Cáceres a cuatro puntos en unos minutos colosales en los que distribuyó juego y anotó ocho puntos, incluidos dos triples (74-78). Schmidt, que fue el principal sustento de la escuadra pucelana en ese tramo, sumó cuatro puntos seguidos que dieron un último impulso al equipo de Paco García, que prolonga su buena racha, y dejó con la miel en los labios al conjunto de Roberto Blanco, que nunca se rindió, pero cuya reacción final fue estéril.

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