Berg deja una bandeja sin oposición en el aro de Almansa. Rodrigo Jiménez
Baloncesto / Real Valladolid Baloncesto

El diván activa al UEMC ante Almansa

Cambio radical de actitud y disposición del equipo de Roberto González, que apabulla de inicio (52-29 al descanso) para manejar las rentas en los dos últimos cuartos

Miércoles, 9 de febrero 2022, 23:46

No existen las casualidades en deporte. Sí las causalidades, las razones que explican un efecto drástico -esperemos que no gaseoso- cuando la situación es límite. Y el UEMC divisaba el precipicio antes de medirse al Almansa, con la soga al cuello después de recibir tres ... sopapos con una media de 90 puntos en sus tres últimas derrotas.

Publicidad

Apuntaba a desahucio, esa es la realidad. Y sin embargo, de la noche a la mañana, su actitud dio un vuelco de 180 grados sin necesidad de multiplicar las sesiones de tiro ni de aumentar las dimensiones del aro contrario. Ni siquiera de meter más horas haciendo 'líneas'. ¿Qué ha podido cambiar, entonces, de un día para otro para que el equipo de Roberto González ridiculice a un rival a día de hoy de 'play-off'? Ni la técnica individual ni la disposición táctica, tampoco la falta de carácter, se cambian con un chasquido de dedos.

La respuesta solo está en su cabeza, y en el trabajo entre bambalinas que se ha venido haciendo con los jugadores contrarreloj en los últimos días. Esa labor de diván salió a flote y activó desde el salto inicial a un equipo con idénticas carencias, pero esta vez con la disposición necesaria para sumar la octava victoria. Más de uno se frotó los ojos en varias ocasiones al comprobar la metamorfosis que experimentaron determinados jugadores.

UEMC Real Valladolid

Wintering (10), Pantzar (12), Puidet (7), Kuiper (12) y Kavion Pippen (6) -quinteto inicial-, Sergio (15), Geks (11), Berg (4), y Raffington (7).

84

-

70

Almansa

Santana (2), Bercy (9), Nesbitt (11), Polanco (7) y Dimakopoulos (14) -quinteto inicial-, Biviá (10), Grabauskas (8), Gydra (4), Balmaseda (5) y Olechnavicius (-).

  • Parciales: 25-16, 52-29 (descanso); 71-53 y 84-70 (final)

  • Árbitros: Pere Munar, Mª Ángeles García Crespo e Imanol Diz. Demostraron una vez más que tres árbitros no ven más que dos. Eliminado Dimakopoulos por faltas.

  • Incidencias: Partido correspondiente a la decimoquinta jornada de la Liga LEB Oro, disputada en el polideportivo Pisuerga. El técnico del Real Valladolid de fútbol, Pacheta, repitió presencia a pie de pista acompañado por David Espinar.

La voluntad fue otra bien distinta de inicio, con un quinteto específico pensado para imponer un ritmo alto y no dejar madurar las posesiones. Menos centímetros en cancha con la intención de construir desde atrás para buscar puntos en velocidad. Traducido a la pista, tres pequeños como primera opción de contraataque (Wintering, Pantzar y Puidet), con Kuiper abierto buscando tiros liberados, y Pippen para jugar 2x2 (bloqueo directo) en lo alto de la bombilla.

Publicidad

Un estilo, engendro de lo que lo que los americanos llaman 'small ball', que nace de la necesidad acusada en las últimas semanas por la excesiva fragilidad y falta de intensidad defensiva. Probablemente la mejor de forma de activar a un equipo, de naturaleza perezosa, que había caido en brazos de la indolencia y pedía a gritos que le pincharan en su orgullo. Es como si las llamadas al mercado hubieran tenido eco en el vestuario.

La apuesta del técnico no tardó en obtener respuesta. De hecho, en 4:30 de reloj el UEMC ya había entrado en bonus producto de una agresividad malentendida atrás. Esa myor dureza, sin embargo, le llevó a manejar el control del partido desde el salto inicial.

Publicidad

Nada que ver con el arranque ante Prat, muy poco con el de San Sebastián, y desde luego ni asomo de la prematura toalla arrojada ante Coruña.

Fue Pantzar quien puso la primera piedra, y también el que encarnó la metamorfosis de un equipo que por momentos recordó en la primera parte al de septiembre -¡qué lejos quedan aquellos primeros pasos en un grupo que parecía haber entrado en involución!-. El sueco, acompañado por el mutante De la Fuente -esta vez en su mejor versión-, no se quedó en esta ocasión en un solo cuarto para la galería y estiró su intensidad hy concentración hasta que le dio el físico. Con 19 puntos de valoración al descanso (11 puntos con 3/3 en rtiples, 3 rebotes y 2 asistencias), Pantzar se permitió incluso el lujo de taponar a Polanco por dos veces en la lína de 6,75.

Con un UEMC enchufado, y hasta hiperactivo por momentos, los puntos fueron cayendo como fruta madura, y los tiros que hasta hace tan solo unos días se antojaban imposibles tornaban ahora en bandejas. La mochila ya no pesaba, y el aro que antes se veía como un desagüe ahora era una piscina de dimensiones olímpicas.

Publicidad

En ese escenario nadó Sergio, buceó Pantzar y hasta flotó Geks, que con dos triples consecutivos obligó a un desesperado Perelló a pedir su primer tiempo muerto (40-25, minuto 15). Debió pedir a los suyos el joven técnico balear que sacaran el paraguas porque en los cinco últimos minutos de la primera parte su rival se pareció más al Covirán, Prat, Coruña y Guipúzcoa que pasaron por encima del UEMC que al equipo indolente de las últimas semanas.

Con riesgo de dar un paso atrás por la diferencia (52-29 al descanso), los de Roberto González no perdieron el equilibrio y continuaron apabullando a un Almansa desdibujado y a años luz del que marca la frontera del 'play-off'.

Publicidad

Tras el paso por vestuarios, Kuiper y Wintering tomaron el relevo para tirar de un carro, ya engrasado, que ya solo tuvo que esperar el desajuste en el rival para mantener las rentas (la máxima fue de 26 puntos, 67-41, al paso por el minuto 25). El acierto fluyó ya en menor medida pero las rotaciones mantuvieron a flote cierta armonía en defensa que bastó para dejar en 70 puntos a un equipo que viene promediando diez más.

El camino a seguir es ese y solo ese. La disposición defensiva mostrada a 1:45 con 84-66 en el marcador debe servir de ejemplo y reproducirse una y otra vez en posteriores sesiones de diván para no echar a perder el surco iniciado ante Almansa.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad