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Si hubiera que resumir en una imagen la trayectoria vital de Pepe Moratinos ninguna mejor que la que ilustra estas líneas. Campo Grande y baloncesto. O Campo Grande y minibasket si lo prefieren, porque si alguien en Valladolid ejerció de protector de la cantera y ... mecenas de una de sus actividades más reconocibles en la ciudad, 48 años como impulsor del Día del Minibasket, ese era él sin duda. Si hubiera que ponerle apellidos al baloncesto en Valladolid, el suyo sería el primero.
José Luis Martín Moratinos (Tetuán, agosto de 1939) ha fallecido a los 83 años después de una semana en la que la salud le jugó una mala pasada, sufriendo un ictus que le tenía ingresado y del que no ha podido remontar tras una segunda recaída. La próxima edición en el mes de mayo del Día del Mini, su ojito derecho que lleva su propio nombre, no será una más.
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El mundo de la canasta llora la desaparición de uno de los precursores, patrimonio del deporte en Valladolid además de fiel defensor del deporte de formación como buena maestro que era. Son muchas las generaciones que han crecido bajo su manto protector, especialmente desde que en 1964 descubriera y decidiera impulsar lo que por entonces se conocía como 'Operación Cien Mil' y que poco después derivaría en el actual minibasket.
Hijo de militar, ejerció primero de profesor en Palencia y Burgos, donde presidió el club Hesperia, antes de cambiar de destino y viajar a Sevilla para, recién casado, difundir sus enseñanzas en el instituto Martínez Montañés. Es en 1972 cuando Pepe Moratinos se ve obligado a regresar a Valladolid por la enfermedad de su padre, y dos años después queda registrada su adscripción a la Federación regional como vocal de Minibasket.
Miembro de la junta directiva y profesor también en el instituto Leopoldo Cano, donde permanece hasta la jubilación, año 2004, Pepe deja una huella indeleble y un sello reconocible en las cuarenta y ocho ediciones que ha organizado del Día del Mini en todos los escenarios posibles, primero en Maristas, luego en Lourdes, La Salle, Francesas,... hasta instalarse definitivamente en el Campo Grande.
Como delegado provincial ejerció desde 1988, entonces Federación Vallisoletana -primero en Simón Aranda y después en Divina Pastora- hasta hace un par de años cuando tomó el relevo Samuel Puente y recibió merecido homenaje, ocupando también durante más de veinte años cargo en la Regional como vicepresidente (1992-2016). En la actualidad seguía al pie del cañón y mantenía su puesto en la junta directiva de la Federación de Castilla y León de Baloncesto presidida por Óscar Castañeda. «Inolvidable aquel tándem Moratinos-Ugidos durante tantos y tantos años al frente de la Delegación de Valladolid, situada por aquellos entonces en la Calle Simón Aranda. Tristemente Enrique Ugidos también nos dejó hace poco más de un año«, apuntaba en la mañana de este lunes el propio Castañeda, quien recuerda a Moratinos como «un hombre entusiasta, capaz, trabajador, humilde, austero, que ha dedicado buena parte de su vida a engrandecer el baloncesto, siempre de forma total y absolutamente altruista».
El presidente de la Territorial anuncia que «desde hace meses en la Federación de Baloncesto de Castilla y León estamos trabajando en la edición del primero de los tres tomos que Pepe Moratinos, dedicando horas y horas, ha dejado escrito sobre la Historia del Baloncesto en Castilla y León». Una más de las muchas publicaciones en las que siempre estaba enfrascado. «Pepe Moratinos ha fallecido, pero su legado nos acompañará siempre», resume Óscar Castañeda.
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