Estados de depresión

Abrines llegó este verano procedido de un periodo de baja deportiva por una depresión o estado de ansiedad que la pasada temporada le llevó a dejar la NBA. Este fin de semana ha anotado 18 puntos en 21 minutos para ser el mejor de su equipo en la victoria en la cancha de Fuenlabrada. Siempre es una buena noticia que un jugador con tanta calidad, internacional español, vuelva a disfrutar de su profesión y que la cabeza le permita hacerlo.

Resulta un secreto a voces que Carroll dejará el Real Madrid cuando termine la presente temporada. Acaba contrato en junio próximo y tiene 36 años, El norteamericano es un jugador muy familiar, y solo rinde a gran nivel cuando se encuentra feliz y rodeado de los suyos, su mujer Baylee y sus hijas. Su ausencia le deprime. Semanas antes de Navidad su familia abandonó Madrid para fijar la residencia en la nueva casa que se habían construido en Utah. Carroll pasó las navidades allí y regresó, con permiso del club, más tarde que el resto, perdiéndose algún partido oficial. El norteamericano no sonríe. Y tampoco las mete. En los últimos seis partidos ha anotado 2/18 triples. Frente a Estudiantes llegó a firmar 1/9, significativo en el jugador más fiable desde el 6,75 de la liga española.

2.- Exprimido. La llegada de Ivanovic a Baskonia ha dejado claro algo que no escapa de las cifras: si hay alguien en quien confía es en Tornike Shengelia. El georgiano disputó el domingo -y decidió el partido con un mate ante Tavares- los 40 minutos en el Wizink Center frente al Real Madrid, algo que no sucedía en ACB desde junio de 2014, cuando Marcelinho Huertas, entonces en el Barça, jugó frente al Valencia los 40 minutos del quinto partido de semifinales de aquella liga. Cierto es que después ha habido más jugadores que han jugado tantos minutos o más en un partido, pero con prórrogas de por medio, pero que uno juegue el 100% de los minutos, este domingo se repitió un hecho que hacía casi seis años que no sucedía.

Y la confianza no termina ahí. En una semana de doble jornada de Euroliga en la que Baskonia perdió sus dos partidos, Shengelia jugó el miércoles en San Petesburgo 37 minutos frente al Zenit de Joan Plaza, y el viernes, otros 32 minutos en Moscú frente al CSKA. 109 minutos de juego en una semana de 120 posibles que certifican el buen estado de forma del georgiano o que se dosifica como nadie, amén de la más que evidente confianza de su entrenador, o que no tiene más para ese puesto.

Baskonia está fuera de la Copa del Rey, lejos en Euroliga y solo tiene el aliciente de la ACB, que es en lo que se centrará de ahora en adelante.

3.- Obradovic se queja. La semana pasada hubo doble jornada de Euroliga. Doble derrota en Moscú del Madrid (CSKA y Khimki), deprimido en la pista y en los resultados anda Laso, sumando derrota en casa en ACB este domingo frente a Baskonia, que también había caído en el doble compromiso ruso entre semana. El Barça cayó en Tel Aviv y ganó al Fenerbahce de Obradovic, también en estado de depresión. Y los blaugranas lo hicieron mordiéndose la lengua y sufriendo en la pista. Tras un gran primer cuarto, un vergonzoso y parcial arbitraje, sibilino e intencionado, metió a los turcos en el partido. Aun así los españoles lograron una importante victoria desde el silencio y evitando las provocaciones para seguir en lo alto de la clasificación. Sin embargo, Obradovic, sin cortarse ni un pelo, anunció al término del partido que protestarán a la Euroliga por el arbitraje. Con un arbitraje justo, hubieran perdido por más de 20 puntos. Con el que tuvieron a favor, a punto estuvieron de ganar injustamente.

Y quien estuvo espectacular esta semana fue Valencia Basket. Cuatro victorias en otros tantos partidos. Victoria en ACB (100-70) frente a Joventut, doble victoria en Rusia en Euroliga frente a Khimki y Zenit, redondeada en casa de nuevo este domingo derrotando a UCAM Murcia por 82-62. Valencia entra en puestos de Play Off, y eso le daría plaza para la próxima Euroliga, pues es la condición impuesta a los equipos procedentes, como es el caso, de Eurocup junto al Alba Berlín de Aíto García Reneses. Y el mérito es mayor si tenemos en cuenta que Dubljevic no estuvo en los tres primeros partidos. Abalde cotiza al alza y llama a gritos la atención de Scariolo.