Melwin Pantzar, un base de calidad para el Carramimbre

Jan Patrik Melwin Pantzar (Estocolmo, Suecia; 10 de abril del 2000) es un base que ha brillado en todas sus etapas de formación y se ha convertido en un especialista defensivo, pero con capacidad para dirigir el juego a pesar de su juventud. Merced a su físico (1,90 metros), el sueco es capaz de emparejarse contra las distintas posiciones del perímetro, desde el 'uno' hasta el 'tres' incluso; mientras que al otro lado de la cancha también se ha destapado como un buen director y anotador. Sustentado en sus cualidades atléticas y su talento, el nuevo fichaje del Carramimbre es capaz de penetrar hacia el aro rival y hacer daño jugando al contraataque, cualidad especialmente idónea para el estilo de Hugo López.

Antes de recalar en el Real Madrid Baloncesto, Melwin Pantzar se formó en las categorías inferiores del conjunto sueco de los Solna Vikings hasta 2016. En el conjunto blanco, asimismo, creció a pasos agigantados disputando ligas Junior, jugando en la Liga EBA con el cuadro filial (11,1 puntos, 3,3 rebotes, 2,8 asistencias y 12,4 de valoración) y siendo una pieza fundamental en los entrenamientos del primer equipo. Su buen hacer no pasó desapercibido y con tan solo 18 años le llegó el premio del debut en la élite del baloncesto español. En el Pabellón Fernando Martín y frente a Montakit Fuenlabrada, la perla escandinava se estrenó en una competición en la que ha sumado un total de nueve partidos en dos campañas.

En la temporada 2018-19, como premio a su progresión y buen hacer, Melwin Pantzar dio el salto de la mano de Pablo Laso y se convirtió en el tercer base del Real Madrid, lo que suponía su primera experiencia profesional después de años destacando en equipos de formación. En la primera división del baloncesto nacional, el joven sueco ha disputado un promedio de siete minutos por partido (1,2 puntos, 0,8 rebotes y 0,6 asistencias) y también logró estrenarse en la Euroliga y ante el Kirolbet Baskonia.

La pasada campaña, no obstante, Melwin Pantzar cambió Madrid por Mónaco e hizo las maletas hacia el cuadro sub-21 monegasco y la Jeep Elite Pro A de Francia. Con el cuadro filial, el director de orquesta escandinavo ha firmado grandes actuaciones y números (15,1 puntos, 5,3 asistencias, 5,4 rebotes y 18,3 créditos de valoración), lo que le ha valido para hacerse con un hueco en el equipo principal.

Con el AS Mónaco, líder de la liga gala, el jugador sueco ha disputado cinco encuentros con casi 14 minutos de media en los que ha sumado un promedio de 3,2 tantos, 2,0 rebotes, 1,2 asistencias y 5 de valoración. Por si fuera poco, Melwin Pantzar, la promesa de presente y futuro que jugará en el Carramimbre la próxima temporada, también cuenta con experiencia en la Eurocup, competición en la que se debutó con el equipo del Principado.

A nivel internacional, con la selección absoluta de Suecia y de la mano del seleccionador y ahora también su entrenador Hugo López, Melwin Pantzar se ha erigido como un habitual en las convocatorias y una pieza importante dentro del combinado. Con su llegada a Pisuerga, así, el técnico vallisoletano ya cuenta con cinco efectivos de cara a esta temporada: Sergio de la Fuente, Greg Gantt, Antoine Mason, Daniel Astilleros y el joven y prometedor base escandinavo.

Sobre la última incorporación a la disciplina carmesí, el técnico Hugo López comentó que «hablamos de un jugador de muchísimo futuro con tan solo 20 años, con una buena carrera en las categorías inferiores del Real Madrid, que viene del AS Mónaco y de estrenarse en la Eurocup, haciendo muy buenos partidos y convertido en miembro de la selección absoluta de Suecia, con lo que lo conozco a la perfección. Está en crecimiento y creo que nos puede aportar mucho. En defensa puede cubrir un gran rango de emparejamientos, desde el 'uno' hasta el 'tres' incluso, y en la parcela ofensiva es un buen director de juego con cosas por aprender aún. Estoy muy contento de embarcarle en este proyecto y que continúe de mi mano en el combinado nacional y en su nuevo equipo».