Aboubacar deja Valladolid para fichar por el Breogán y Tom Leimanis jugará en Bielorrusia

Su oferta a Aboubacar, irrechazable en lo económico (de una duración de dos temporadas), ha resultado inalcanzable para la directiva del club vallisoletano, que ahora tiene sobre la mesa la difícil misión de construir un nuevo proyecto prácticamente de cero. A la marcha ya confirmada de Bartley, Aboubacar y Leimanis, que jugará en el Tsmoki Minsk de Bielorrusia -o lo que es lo mismo buena parte de la columna vertebral-, podría unirse la de Mike Torres, que baraja dos opciones como jugador secundario en ACB y una con un perfil de mayor protagonismo en LEB Oro procedente de Girona.

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Bajas muy sensibles que obliga a la dirección deportiva a reinventarse y remangarse una vez más para bucear en el mercado y encontrar jugadores en progresión que tengan la ambición de dar un paso adelante para convertirse en referencia en la competición.

El caso de Seydou Aboubacar (Níger, 1994) es el ejemplo perfecto de progresión en el campeonato con un último año en el que dio un gran salto de calidad promediando 6,8 puntos y 7 rebotes. El pívot internacional por Costa de Marfil, que ya jugó en tierras lucenses en la temporada 2016-17 (Estudiantes de Lugo) y completó los entrenamientos de la primera plantilla del Breo en varias etapas, deja Valladolid dos años después de aterrizar de la mano de Paco García.

El club que preside Mike Hansen, mientras, continúa trabajando para ultimar el acuerdo que le unirá al Real Valladolid y que en principio no se traducirá en un aumento en el presupuesto, al menos en su primer año.