Marco alonso
Martes, 1 de diciembre 2015, 19:35
La noticia ha corrido como la pólvora. Porfi Fisac es el entrenador elegido por el Gipuzcoa Basket Club (GBC) para sustituir a Jaume Ponsarnau al frente del equipo donostiarra. El técnico segoviano ha recibido una oferta en una reunión que ha mantenido con el presidente de honor del club, Miguel Santos, y con su director general, Germán Cea. Fisac tiene contrato en vigor con el Quesos Cerrato y ahora la pelota está en el tejado del club palentino, que tendrá la dura tarea de negociar la salida del artífice del mejor arranque de la historia de la entidad en la Liga LEB Oro.
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«Estamos intentando llegar a un acuerdo con Porfi y con el GBC para rescindir el contrato», aseguró el presidente del Quesos Cerrato, Gonzalo Ibáñez, que no quiso entrar en los detalles de ese acuerdo. «No decimos nunca esas cosas. Lo haremos bien o mal, pero no se dicen», afirmó Ibáñez.
La noticia ha sido un mazazo enorme para el club, que estaba encantado con la campaña que estaba firmando Fisac. «No nos lo esperábamos. Aunque, cuando veíamos a San Sebastián tan abajo, sí que decíamos que ojalá no se acordaran de Porfi. Pero al final se han acordado», señaló con pesar el presidente, que espera que estos cambios no desestabilicen a un club que es líder y que está disputando una campaña para el recuerdo. «Las cosas van muy bien y cualquier cambio que haya en el camino puede afectar. Cuando algo va bien, ni lo toques, que dice el dicho», afirmaba ayer Ibáñez, pero todo hace indicar que el club palentino estará obligado a tocar el pilar maestro sobre el que se ha edificado este equipo, pero no por gusto, sino por exigencias del guion.
Porfi Fisac estaba firmando unos números de escándalo al frente del Quesos Cerrato. El equipo que ha confeccionado se está mostrando intratable, solo ha perdido un encuentro de los nueve que ha disputado hasta ahora y ha hecho que la afición se ilusione gracias a una plantilla que cada viernes derrocha cabeza y corazón a partes iguales, pero el técnico puede pasar de ser cabeza de ratón a convertirse en cola de león. Y es que el GBC de San Sebastián ha tenido un arranque liguero en la ACB para olvidar. El conjunto donostiarra aún no ha ganado ni un solo partido de los ocho que ha jugado hasta el momento y, además, destila unas sensaciones malísimas, razón por la cual el técnico, Jaume Ponsarnau, fue destituido.
Ahora, la decisión le corresponde al Quesos Cerrato, con el que Porfi Fisac tiene firmado un contrato que tendrá que cumplir si no se encuentra una solución. «Vamos a ir paso a paso. Él tiene una oferta, y si llegamos a un acuerdo, se irá y si no llegamos a un acuerdo, pues seguirá», afirmó el presidente del Quesos Cerrato, que apostó en su momento por fichar a Porfi no solo por sus cualidades como entrenador, sino por su más que conocida capacidad para la gestión psicológica de grupos, algo que también ha sido determinante para que el GBC se haya fijado también en él.
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