Pimentón, el toque que no falta

Poco se imaginaba Cristóbal Colón cuando trajo a España el pimentón que este ingrediente se convertiría en una de las especies más utilizadas en la cocina. Una alternativa a la hasta el momento hegemonía de la pimienta para darle ese sabor tan particular. Especialmente en la provincia de León, el pimentón está indiscutiblemente ligado a la cultura gastronómica. Empleado para darle aroma, sabor y color a numerosos platos se utiliza tanto en carnes como pescados, la sopa de trucha o el bacalao, por ejemplo. Tampoco se escapan las tapas porque muchos son los que se atreven a pulsar su capacidad de soportar el picante con una ración de patatas con pimentón. Los más lanzados tienen siempre a mano alguna bebida con la refrescarse de la experiencia. Se utiliza en los sofritos para innumerables platos y en la mayoría de los casos corresponde a la DOP Pimentón de La Vera, que se produce en Extremadura. También es conocido el de Murcia pero, ojo, porque la tradición productora de pimentón también tiene historia en Castilla y León. En concreto, en Ávila donde en la zona de Candeleda este producto está ligado a la vida del municipio, en el que a principios del siglo XVII se habilitó una zona para el secado rápido de los pimientos mediante su exposición al humo. Actualmente, se conserva la zona de los sequeros, una pieza genuina y singular del patrimonio arquitectónico de Candeleda. El pimentón se obtiene de secar y moler diferentes variedades de pimientos rojos y según su sabor se establecen tres grupos: el dulce, con un sabor suave; el agridulce, que mantiene unas notas picantes al paladar, y el picante, en este caso, el picor es pronunciado. Además de utilizarse en la elaboración de embutidos varios, no falta como condimento en platos como el pulpo con patatas o las patatas a la riojana. También lo encontramos en el hummus de garbanzos o cocinado con verduras como el repollo y la berza. Por cierto, una pizca en las clásicas judías con patatas regadas un con un chorrito de un buen aceite de oliva transforman el resultado de este plato. Eso sí, siempre hay que tener cuidado con la cantidad y la variedad, para evitar sustos en la primera cucharada, si es que se opta por el picante aunque en la mayoría de las ocasiones en cocina se utiliza el agridulce o el dulce. Coincidiendo con la temporada de verano y el auge de las paellas familiares, el pimentón además del azafrán, es otra de las especias que se pueden utilizar en su preparación, además de en cualquier tipo de arroces pero también en, por ejemplo, un plato de caracoles en salsa o una empanada de verduras.