Lombarda, vitamina C y antioxidantes

La lombarda contiene en más de un 90% agua, por tanto, su aporte calórico es muy bajo, alcanzando solo las 21 calorías por 100 gramos. EL macronutriente fundamental son los hidratos de carbono y azucares, alcanzando casi los 7 gramos, con muy pocas proteínas, 1 gramo y apenas grasas, menos de 0,5 gramos. No aporta colesterol. Pero si aporta bastante fibra, entorno a los 2,5 gramos.

En el capítulo de los minerales, los más importantes son el potasio, calcio y fosforo, por este orden. No obstante, es necesario tener cuidado en su cocinado, ya que estos minerales en la cocción difunden al agua, y si ese agua se desecha, perderemos todos los minerales.

Con respecto a las vitaminas, la más abundante es la vitamina C y en segundo lugar el ácido fólico. La vitamina C contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo y los folatos contribuyen a la formación normal de las células sanguíneas. Como el resto de las crucíferas contiene sustancias fitoquímicas (glucosilonatos, isotiocianatos, indoles).

También contiene flavonoides, entre los que destacan los antocianos, cuyo componente más abundante es la cianidina, que confiere el color morado a la lombarda, y la quercetina (aunque en cantidad muy inferior a la del brócoli). Las crucíferas también contienen compuestos bociógenos que, en personas predispuestas, pueden producir aumento tiroides, al interferir con el metabolismo del yodo.

En resumen, estamos ante una hortaliza rica en fibra, vitamina C y antioxidante naturales.