Pedro Ballesteros con el consejero Jesús Julio Carnero en la sala de catas de Duero Wine. Carlos Espeso

Duero Wine Fest apuesta por lanzar los vinos de calidad de Castilla y León en los mercados internacionales

El consejero Jesús Julio Carnero reivindica el papel del terruño y el valor las nuevas variedades tradicionales recuperadas de la extinción

El Norte

Valladolid

Lunes, 18 de octubre 2021

Tres años después de su primera edición, el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, ha inaugurado hoy en Valladolid la II edición del Duero International Wine Fest, el mayor congreso vitivinícola de España, que pretende «seguir posicionando los vinos de Castilla y León en el panorama internacional, ahondar en la cultura del vino en relación con los jóvenes; incidir en el terruño y en la viticultura, porque sin uvas no hay vino (el consejero tomó como suyas las palabras del bodeguero Luis Sanz de Dehesa de los Canónigos); y ampliar los conocimientos sobre las variedades minoritarias porque nos permite ser más auténtcas».

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Este congreso está impulsado por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural a través del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl). Carnero recordó que los técnicos del Itacyl han estudiado 25 variedades autóctonas que corrían peligro de desaparación y que han comprobado que 14 de ellas tienen capacidad para elaborar vinos de calidad. Una cata magistral, conducida por el Masterr of Wine Pedro Ballesteros, permitirá conocer los vinos que se han elaborado con esas castas no dominantes.

Esa 14 variedades presentan muy buenas cualidades enológicas o agronómicas y también de adaptación al cambio climático en sus lugares de procedencia, uvas capaces de funcionar bien en el viñedo y formar parte de un ensamblaje, diferentes entre ellas y también distintas a las variedades ya establecidas. Esas 14 variedades son: Áurea, Bastardillo Chico (Merenzao), Bruñal, Cenicienta, Estaladiña, Gajo Arroba, Mandón (Garró), Negreda, Negro Saurí (Merenzao), Puesta en Cruz (Rabigato), Puesto Mayor, Rufete Serrano Blanco, Tinto Jeromo y Verdejo Colorao.

Cada una es diferente y singular, por eso Carnero lo ha valorado como «una apuesta clara hacia el futuro de unas denominaciones de origen más volcadas en el origen y la resistencia al cambio climático que afecta al viñedo mundial. Se trata de recuperar el legado pasado para escribir el futuro del vino de Castilla y León». Todo ello supone un activo que abre más opciones de rentabilidad y valor añadido a los viticultores, tanto por su adaptación al territorio como por el hecho de dar lugar a vinos novedosos e interesantes para los mercados.

Este programa de recuperación de variedades minoritarias ha permitido que zonas productoras tradicionales como la DO Bierzo incorpore a su pliego de condiciones las vinificaciones con Estaladiña y Merenzao, la rufete blanco serrano en la DOP Sierra de Salamanca, y que otras variedades como la Puesta en Cruz, Gajo Arroba y Tinto Jeromo puedan formar parte del abanico de variedades recuperadas de la extinción y permitidas para elaborar vino en la DO Arribes, o la Negro Saurí en la DO León.

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Otras variedades como la tinta Cenicienta, localizada en la DO Rueda, y con muy pocas cepas, está en peligro de extinción real. Es una variedad totalmente nueva de la que se dispone de un clon certificado y muestra un enorme potencial para vinificar vinos de enorme potencial y personalidad.

Esta II edición de Duero Wine mostrará también la importancia de la cuenca portuguesa del río a través de un viaje por sus elaboraciones y paisajes, y congrega a los profesionales más importantes del sector de dentro y fuera de nuestras fronteras, para tratar el potencial, impacto, repercusión y futuro de la Comunidad.

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El congreso cuenta con la participación de 420 inscritos, entre ellos los 50 ponentes (14 de ellos extranjeros) y 45 periodistas especiliazados en vino.

Algunos de los asistentes a Duero Wine en el Auditorio de la Feria de Valladolid. Carlos Espeso

Estructura

Duero Wine se divide en tres áreas principales: sala de ponencias y mesas redondas, ágora enológica donde se celebrarán talleres y catas como por ejemplo las añadas míticas de Alejandro Fernández, y una zona expositiva y de degustación, denominada 'Duero Wine Bar' con presencia de todas las denominaciones de origen de Castilla y León, abierta al público para que puedan degustar los vinos de la comunidad. También habrá un espacio para los vinos del Duero portugués.

Durante las dos jornadas de Duero Wine se llevarán a cabo hasta 14 ponencias y se desarrollarán cinco catas magistrales específicas: Grandes vinos del Duero-Douro, Vinos de las castas no dominantes de Castilla y León, Añadas míticas de Alejandro Fernández Tinto Pesquera, Los vinos de paraje Rapolao del Bierzo, y Vinos de variedades recuperadas de la extinción en Castilla y León.

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650 bodegas

El sector del vino representa un pilar básico de la economía de Castilla y León, generando más de 1.000 millones de euros anuales, y un papel muy destacado a nivel social por la fijación de población en el medio rural, dado que emplea unas 19.000 personas, entre viticultores y las 650 bodegas.

En 2020 se exportaron vinos por un valor de 167 millones de euros. Castilla y León cuenta con 14 figuras de calidad que abarcan una superficie de en torno al 90 % de las más de 70.000 hectáreas plantadas en la Comunidad.

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Actualmente se exporta a 105 mercados del mundo, acumulando el 60 % en cinco grandes países: Suiza, Alemania, EEUU, Países Bajos y México.

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