Secciones
Servicios
Destacamos
De la devoción procesional a la del teatro en la calle median en Valladolid apenas dos meses. Ayer tarde decenas de personas hormigueaban por la plaza de Poniente buscando alegría alrededor de los seis músicos de la Mimo's Dixie Band. Allá donde se escuchaba ... la vibrante melodía saliendo de trompetas, clarinetes, trombones y una tabla metálica, allá acudían tras ellos. En procesión, papás y mamás con carritos con niños, jubilados, jóvenes... Empieza el TAC y las calles mudan de ambiente. Del silencio procesional semanasantero de marzo a la algarabía de mayo en un festival que comenzó al ritmo de un jazz que remite a Nueva Orleans paseando por el centro de Valladolid.
Noticia relacionada
Irrumpió la banda portuguesa en el Museo Patio Herreriano, y con ellos toda su corte de animados seguidores, que se sumaron al acto inaugural en el Patio de los Reyes. Un breve discurso del alcalde, Jesús Julio Carnero, dio paso al homenaje a la bailarina Claire Ducreux a la par que en varios espacios del casco histórico el público se agolpaba alrededor de escenarios donde se desarrollaban las primeras actuaciones.
En la plaza de Portugalete los asistentes a la actuación de Maleta Company & Cie Balancetol cantaban a coro cumpleaños feliz a una marioneta-abuela de 90 años jugando con su nieto. Malabarismos y equilibros de dos artistas en torno a una bandeja repleta de nata, pelotas por los aires... la siguiente actuación en este espacio a cargo de Vol'e Temps fue aplazada varios minutos a causa de la lluvia que comenzó a caer. Fue escasa, pero suficiente para hacer peligrar el número de danza ejecutado sobre patines al son de un clarinete.
Cerca de allí, en San Pablo, Mariona Moya se desenvolvía con soltura manejando una enorme pértiga con la que ejecutó su número de funambulismo ocupando gran parte de la plaza, acordonada en buena parte del perímetro peatonal, lo que permitió que más espectadores disfrutaran del espectáculo en las primeras filas. Música de fondo y danza en ejercicios de funambulismo que fueron aplaudidos por el público. Mientras la fachada de San Pablo se iluminaba por momentos con los últimos rayos de sol del día, la silueta de Mariona Moya se proyectaba sobre las esculturas haciendo equilibros sobre un cable elevado varios metros sobre el suelo. Belleza sobre belleza. De vuelta a Portugalete, el grupo Martí Soler puso en escena 'Finestres', un montaje sobre el acercamiento a los otros y la fragilidad humana. Mientras, el jazz más vital de los Mimo's Dixie Band cobraba de nuevo presencia, ahora en la zona de Fuente Dorada y Teresa Gil, donde congregó a otras docenas de seducidos por su ritmo revitalizante.
Por los alredeodres de Poniente y Martí Monsó desplegó sus cuatro atletas Nacho Villar Producciones & Yllana, en torno a una competición olímpica que desmitifica la necesidad de la victoria a toda cosa. Ya por la noche, los franceses de Bivouac hicieron exhibición en la Acera Recoletos de su número de danza coreográfica y acrobacias, dando el relevo a los bailarines de Teatro do Mar con su alegato contra la apatía social y la desconexión de relaciones sociales en tiempos de múltiple interacción tecnológica. El TAC tiene por delante otros cuatro días para animar, divertir, maravillar y hacer pensar a un público devoto tras un cuarto de siglo de espectáculos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.