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José Luis Gutiérrez homenajeará a Eduardo Cuadrado desde su saxo, las voces de XYK Singers que dirige Víctor Galván cantarán con su voz y su cuerpo a las artes escénicas desde el circo del XIX y Miguel Gigosos probará sus malabares en el agua ... al son de la música de Frédérika Alésina. Son tres propuestas de las siete que firman artistas vallisoletanos que han dado preeminencia a la música en el XV Festival de Teatro y Artes Escénicas (TAC), que comienza mañana en Valladolid.
Eduardo Cuadrado el autor de al escultura 'El comediante' que sirve de premio y de imagen identificadora del TAC murió el pasado mes de enero. La dirección del festival le propuso a su amigo José Luis Gutiérrez que ideara un homenaje y el saxofonista ha retomado un préstamos estético que Cuadrado le hizo para arrancarse con 'Náufragos y máscaras'. «Ideó un manera de lograr tridimensionalidad proyectando en la pantalla a través de un racimo de globos que giraba. Produce un efecto multiplicador e hipnótico y lo he usado para este espectáculo», explica el músico de jazz. «Su estética en los últimos años fue hacia los náufragos, los menos favorecidos, los que no tenían nada y las máscaras, borrar esas que nos esconden». Y sobre esos conceptos gira la propuesta de Gutiérrez que recuerda a Cuadrado como un ser «que hacía que el mundo fuera mejor a su paso. Es un adecuado mensaje por la emotividad de Eduardo, por su contundente mensaje».
Virginia Urdiales y Rodrigo Tamariz han creado 'El jardín mágico' para otro que no lo es menos, el Campo Grande. Urdiales procede de la Escuela Superior de Arte Dramático y se ha dedicado a la aplicación de la tecnología a la escena desde el videomapping. «Es un placer entrar en el pulmón de la ciudad, tiene una magia especial. Hemos preparado una instalación de luz y poesía que podrá recorrerse en grupos de cinco personas», explica Virginia.
Víctor Galván y las XYK Singers presentarán 'Circa. /chirca/', «un espectáculo concebido desde el amor el pasado verano, en el momento de mayor libertad.Es un homenaje a las artes escénicas y a la belleza, entremezcla lo profesional y lo amateur, desde el circo del XIX, el de la supervivencia, en el que cada uno aprendía un oficio, de eso tiene mucho el arte de calle. Seremos solo cinco personas en escena dado que nos tenemos que adaptar a la situación y al escenario, en el jardín de la Casa Zorrilla».
Por su parte, Miguel Gigosos, que trabaja «en los malabares y el agua» anda ultimando 'Caudal', una mezcla de malabares, agua y música en directo. «Surge de una idea antigua en torno a hacer algo en una fuente pública, a partir de ahí comencé a investigar en tipos de pelotas para trabajar en el agua, en imágenes». A su amiga cantante Frédérika Alésina «la someto a todo tipo de torturas», será en la fuente de Poniente.
A pesar de acompañar la mayor parte de los espectáculos del teatro de calle, la música es «la cenicienta, la hermana pobre de las artes escénicas», explica Gutiérrez que celebra al feliz coincidencia de propuestas para este TAC en las que su arte en directo cobra protagonismo. «Nos van quedando cada vez menos reductos. Ayer mismo en Getxo, recogiendo los trastos, quise ofrecerle un disco como un regalo a un miembro del staff y me dijo que no tenía reproductor, que escuchaba música en las redes sociales. De modo que la música es gratis y está disponible. Hemos perdido el poder económico. Me gusta llevar la música a lugares y propuestas diferentes como esta que tramos».
Víctor Galván consideró la música como otra arte de calle, más allá de la mezcla. En cuanto a su agrupación prefiere no emplear la palabra coro «porque es un concepto pasado de moda» –el Bach de su camiseta aguantó inmóvil– y lo considera «un grupo vocal performativo porque usamos la música para expresarnos, pero no solo, también el cuerpo».
Estas cuatro compañías competirán con el resto sin categoría geográfica, no habrá premio específico para las propuestas locales. Habrá otras tres propuestas con artistas vallisoletanos en sus filas como recordó Charo Arconada, de la organización del TAC. Frantics dance Company es una compañía de danza contemporánea radicada en Berlín y dos de sus cuatro componentes son vallisoletanos, Carlos Aller y Diego de la Rosa. Junto con Juan Tirado y Marco di Nardo presentan 'Last Space'. El Kolektiv Lapso Cirk es una formación creada por el pucelano David Díez Méndez y el eslovaco Tomas Vaclavek que trabaja en el circo especializado en la manipulación de objetos y el equilibrio. Presentarán 'Ovvio'. Finalmente Pez Limbo, compañía residente en el País Vasco cuenta con tres vallisoletanos –Raúl Camino, Begoña y Silvia Martín– entre sus filas. 'Pulgas' es su propuesta, un acercamiento a tres espacios cotidianos que provocan drama y comedia salpicados de humor.
Ana Redondo, concejala de Cultura, recordó que su área lleva ofreciendo espectáculos durante todo el año, siendo rigurosos con las medidas sanitarias, y que la cultura es segura, por lo que se mantendrá la programación. El repunte de casos de covid no está ligado a la cultura.
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