'Los pazos de Ulloa' en Valladolid: adaptaciones con éxito

Las adaptaciones escénicas de novelas famosas han sido una constante en el teatro y el cine. En estos momentos de crisis se ha convertido en un lugar común. Prefiero la obra escrita para la escena, hay un repertorio desconocido, clásico y contemporáneo, pero comprendo su actual necesidad. El local tiene que llenarse, como ocurrió este fin de semana en el Calderón con 'Los pazos de Ulloa' así se salvan los muebles.

Las adaptaciones dan el tono. Lo explicaba Helena Pimenta. Tono realista. El dialogo de la novela fuerza la pieza teatral. Así ocurre que predominan las escenas de confrontación de dos personajes, en expresiones correctas de momentos importantes. En la conmemoración de doña Emilia, una de las primeras feminista de España, bien está este espectáculo.

Además lo dirige Helena Pimenta que con su compañía, primero como responsable del Teatro Clásico, ha hecho montajes muy meritorios y originales, dejando su importa en todos ellos, incluso en el que comento. Impronta en el tono, un tanto convulsivo desde la confrontación de don Julián, el cura, con el cacique y violento Marqués de Ulloa.

La colocación de los actores está también muy lograda, sobre todo cuando están todos en escena, aunque no formen parte directa de ella.

En la escenografía se comprueba la decadencia de los Pazos de Ulloa. Un muro con una puerta que señala el dentro y fuera, acompañado de una cama rústica, una mesa y unas sillas, así como un pequeño altar en el que reza varias veces el cura. La ciudad cubre el muro de colores y algunas imágenes se proyectan. La compañía ha trabajado bien y el homenaje a la Pardo Bazán se logra.

Actores profesionales que cumplen sobradamente. Pere Ponce, como don Julián el curita, hace un trabajo agotador. Dos horas en escena. Marcial Álvarez, a su altura, como las dos féminas. El montaje parece voluntariamente de otro tiempo y es el camino exacto. El realismo, la normatividad que se desprende de una novela del siglo XIX famosa y el propio lugar de la acción lo exigen. Un año y medio de gira con buen resultado. El público, como siempre, aplaudió con calor a los seis intérpretes. Helena prepara una obra de George Tabori. Vuelve al siglo XXI.

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