Olmedo Clásico recupera las cifras previas a la pandemia con 8.000 espectadores

Esto supone una ocupación media –a lo largo de todo el certamen– de tres cuartas partes en la Corrala del Palacio del Caballero. Pero los montajes del fin de semana han rozado el lleno y, en algunos casos, «incluso se han ocupado las butacas de visibilidad reducida», explica Benjamín Sevilla, codirector del festival.

Las funciones con mayor tirón han sido las dos propuestas vinculadas con Molière ('El avaro', con Atalaya Teatro, y 'Tartufo', con el actor Pepe Viyuela), así como 'Malvivir', que reunió sobre las tablas de Olmedo a Marta Poveda y Aitana Sánchez-Gijón. Las risas llenaron las butacas, además, el primer fin de semana con 'Amo y criado', una comedia de capa y espada nacida de la colaboración entre la compañía Noviembre y la colombiana Teatro Libre.

La dirección de Olmedo Clásico aseguró este martes que esta participación internacional continuará vigente en la edición del próximo año, donde «se mantendrán las líneas de trabajo internacional», con la vista puesta en una compañía japonesa que explora en su repertorio el teatro clásico español, con una mirada especial a Lope de Vega.

Su obra 'El caballero de Olmedo' –emblema de la localidad vallisoletana– ha estado presente en el programa de este año a través de una versión especial, que ha formado parte de una oferta de quince espectáculos tanto en la Corrala como en el centro de artes escénicas San Pedro, que del lunes 25 al miércoles 27 acogió las jornadas 'La salud de los clásicos'. Fueron doce sesiones (con presentaciones, recitales y mesas redondas) en las que se diseccionaron varias de las piezas puestas en escena en el festival y se analizó el futuro «de un teatro clásico que goza de una salud de hierro».

Para el próximo año, el festival mantendrá su «fórmula contrastada» de diez días, con el foco en los montajes teatrales y el complemento de las jornadas de profesionales. «Todavía no hemos decidido el tema que articulará la edición número 17. Depende mucho de las producciones que estén de gira. Ya hemos recibido varias propuestas, pero quedan meses de trabajo por delante», cuenta Sevilla, satisfecho por la calidad de la edición clausurada este fin de semana. «No somos un festival de estrenos. Los espectáculos ya llegan aquí rodados y eso se nota en lo bien engrasados que están».