Arranca una Seminci renovada con la mirada en los Goya

Con esa premisa ha comenzado la 68ª edición de la Seminci, pensando en el pasado pero mirando al futuro. Ese vistazo en el horizonte se ha focalizado en febrero de 2024. Es decir, a los Goya, que acogerá Valladolid. «Definitivamente, es una ciudad de cine», ha zanjado la presentadora. Su mensaje ha dado paso al primer homenaje de esta edición, que ha tenido como protagonista al cine europeo. Estaban presentes en el teatro Calderón varios miembros de la Academia de Cine Europeo, encabezados por Agnieszka Holland, presidenta de la EFA por sus siglas en inglés. Ella ha tenido el honor de recoger la primera Espiga de Honor de esta semana, en los próximos días lo harán Blanca Portillo, Charlotte Rampling, Nathalie Baye y Kiti Manver. «Es muy importante que el cine europeo trabaje conjuntamente estos días», ha expresado Holland.

El encargado de entregar este primer galardón ha sido el director de la Academia de Cine Española, Fernando Méndez-Leite, quien ha rememorado su primer paso por la Seminci. «Mi primera vez aquí fue en el 1968, que no en su 68 edición, que es la que celebramos hoy», ha bromeado. Méndez-Leite también ha querido poner los ojos en los Goya y ha asegurado que esperan un éxito enorme para la gala. «Así es como lo estamos preparando», ha confesado antes de dar la espiga a la directora de la Academia de Cine Europeo, quien también presenta película en el festival. Precisamente ha sido su cinta, 'Green Border', la primera proyección de la sección oficial de esta edición, donde compiten 17 largometrajes.

También sabe lo que es competir en la Seminci, y ganar, Pan Nalin. El director indio -su nación natal es además el país invitado de esta edición- consiguió la Espiga de Oro por su cinta, 'Last film show'. Ahora ha vuelto a Valladolid como miembro del jurado internacional que se encargará de deliberar sobre las películas ganadoras. Suyo ha sido el mensaje más reivindicativo de la noche. «Ahora mismo hay 32 guerras en el mundo. Necesitamos películas más que nunca. Historias y gente que las cuente, de todas las tallas y colores», ha señalado. Escondido, entre el público, escuchaba con atención Javier Angulo, el antiguo director del festival. Otra de las declaraciones de la noche ha sido la del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, quien ha defendido «ensanchar» el espacio cultural para que «no esté secuestrado por unos pocos».

De vuelta al cine y esta edición renovada, Marta Nieto ha destacado las novedades que este año acompañan la Seminci. La principal innovación está en la nueva sección, Alquimias, que hace las veces de una extensión de Punto de Encuentro. Aquí se darán cita historias de latitudes diferentes y dirigidas con autores de cierto recorrido y reconocimento en el circuito de festivales. También aparece la sección Memoría y Utopía, donde se proyectarán varias películas restauradas. Este propósito, recuperar y preservar el cine es otro de los aspectos donde la Seminci pone el foco esta semana, con varias mesas redondas organizadas en torno a este tema. «Es una aspecto de gran relevancia. Me pregunto cuántas películas que se proyectarán esta semana se podrán ver dentro de un siglo», ha comentado la directora de la Filmoteca de Castilla y León, Maite Conesa.

Ha sido el último paso antes de que entrara el equipo de 'La contadora de películas', la cinta encargada de inaugurar esta Seminci, dirigida por Lone Scherfig y protagonizada por Antonio de la Torre, Sara Kecker y Alondra Valenzuela. Ha sido esta última, la actriz de doce años, quien ha lanzado uno de los últimos mensajes de la noche. «Espero os guste, que lloréis, que riais y eso». Un eso donde cabe todo, emoción a elegir, pero donde el cine es de nuevo el protagonista para unir al espectador a través de lo que transmite.