Yann Tiersen: «Ni la vida ni la música no son números»

«Hace cinco años estaba en California, mi vida corrió peligro y todo aquello me mostró lo importante que es la relación con el ecosistema, con el medio que nos rodea. Cambió mi vida y salió el disco 'Eusa'», explica Tiersen, que vive en la isla Ouessant, cuya nombre e bretón es Eusa. Trabaja y vive en una isla, allí ha construido un estudio The Eskal, donde graba «como en los viejos tiempos, en los setenta, de forma analógica, porque la vida no son números, quiero presentar mi música como la realidad».

En 'Eusa' comenzó a trasladar sus ideas ecologistas a su música, que incluía grabaciones del campo en directo, mezcladas con sus composiciones. 'All' mantiene esa conexión con el medio ambiente, tan solo hay un tema, 'Tempelhof', con una grabación urbana en el aeropuerto berlinés. Si hay una palabra que Tiersen repite en su parco discurso es experimentación. Quien tuvo formación clásica y atravesó etapas rockera, punk, folk y minimalista, se siente hijo de «la música punk postindustrial de los noventa». Sus últimos discos son la suma de todo eso.

Los temas vocales de 'All' son cantado en bretón y ha contado con la colaboración de vocalistas como Anna von Hausswolff (en 'Kode') o Ólavur Jákupsson (en 'Erc'h') así como Denez Prigent, Emilie Tiersen y Gaëlle Kerrien.

A pesar de la belleza de sus vídeos tocando el piano en una verde colina de su isla, la faceta más conocida de Tiersen es la de sus bandas sonoras, algo que él niega. «No soy compositor de bandas sonoras, sino de álbumes cuya música se ha utilizado en otros medios», dice casi ofendido. De hecho ni se considera «compositor, sino más bien un músico que experimenta y toca con otros músicos, con los que llevo trabajando mucho tiempo».

El piano es la base de estas composiciones y el instrumento que le sirve a Tiersen para crear la atmósfera que busca en los conciertos. Aunque Yann sigue frecuentando el violín, la guitarra o el acordeón además de llevar siempre instrumentos de juguete, como un piano infantil y las campanas. Suele repasar temas de otros discos, así que es probable que suene el 'Vals de Amélie'. Valladolid es una de las cinco ciudades españolas de la gira del compositor francés.

La cita es este jueves, en el auditorio Miguel Delibes, sala sinfónica Jesús López Cobos, a las 20:30 h. Las entradas cuestan entre los 20 y los 48 euros.