Orovega presenta los eclécticos sonidos de su disco en el Zorrilla

«Mi música tiene muchas influencias. Toda la música que escucho se incorpora a mi imaginario. Desde el pop, la música melódica, el flamenco, la electrónica, las músicas de raíz, urbana, músicas contemporáneas…». Una diversidad de la que no dan justa cuenta cada uno de los cinco singles, acompañados de video en cuatro de ellos, que ha ido sacando en el último año y medio como preparación de su disco, lanzado digitalmente a finales de marzo. «A través del disco se entiende mejor mi propuesta. Los singles cobran sentido en el álbum completo».

'Cantes de amor y muerte' es un buen ejemplo de cómo se compone y se graba la música hoy. Orovega y su compañero de aventuras musicales, Al Blanco -que le acompañará el sábado en el concierto- se reunieron en torno a un ordenador con varios instrumentos a su alrededor y fueron dando forma al disco. Nada de juntarse en un estudio con una docena de músicos.

Ha sido un proceso laborioso, como de cocción lenta. «Hemos estado trabajando en el disco desde el comienzo de la pandemia hasta hace unos dos meses», recuerda Orovega. «Ha sido un proceso muy colaborativo y algunos temas los hemos compuesto entre los dos», explica la cantautora madrileña.

El espectáculo del sábado será sobrio, como su música, apoyada sólo en el juego de luces, si bien ofrecerá las sorpresas propias de su propia dinámica musical. E incluso un interludio hablado, a modo de monólogo, en el que contará al público alguna historia.

«Hace más de tres años que no toco en Valladolid y ya tengo muchas ganas, y más ahora que presento mi nuevo disco».