La artista Lola Flores. EL NORTE
Centenario de 'La faraona'

Lola Flores y Valladolid: sus giras en los años 40 y su romance con un futbolista del Pucela

La Faraona se convirtió en una habitual de los teatros de la ciudad y mantuvo una relación con el jugador Gerardo Coque

Víctor Vela

Valladolid

Domingo, 15 de enero 2023, 00:52

Primeros días de abril de 1941. El teatro Lope de Vega –en el centro de Valladolid– acogía un espectáculo apadrinado por Juan Carcellé. El empresario teatral había reunido a un ramillete de artistas con el objetivo de recorrer los cafés y teatros del norte de ... España con un espectáculo de variedades que, a la postre, no tuvo mucho éxito. De hecho, fue un fracaso económico para su promotor. ç

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Sin embargo, algo había en aquellas funciones que maravilló al público. Junto a Roberto Rey («famoso galán de la pantalla»), Angelines Velázquez («linda bailarina española») o Jack Boy y Lisa («coreógrafos grotescos») actuaba una «espléndida belleza andaluza» que en apenas unos años se convertiría en uno de los nombres más famosos del mundo de la farándula patria.

Aquella fue la primera vez que Lola Flores –el 21 de enero se celebra el centenario de su nacimiento– aparecía en El Norte de Castilla. A lo largo de esa década de los 40, su nombre sería habitual en las páginas del diario, porque durante esa década ofreció varios recitales en la capital del Pisuerga. Las giras teatrales de provincias fueron su tarjeta de presentación, antes de que su nombre se hiciera famoso en América y el cine la retirara poco a poco de los escenarios.

Lola Flores estrenó el año 1943 en Valladolid. Los días 2 y 3 de enero actuó en el Calderón dentro del espectáculo 'Cabalgata', de la Compañía Española de Bailes y Canciones, donde había sido contratada un año antes. El espectáculo («lo más nuevo y original que se ha presentado en Valladolid») llevaba ya varios meses de éxito en el Teatro Fontalba de Madrid y Lola Fores participaba con cinco números, entre los que destacaba una canción: 'El lerele'.

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El crítico del periódico alabó el montaje («de excelente calidad») y, de todos los nombres, destacó los de Mercedes Begoña («que demuestra su arte y luce su extensa voz»), Lolita Gallego («notable bailarina») y Lola Flores («flor a su vez de la gitanería)».

El éxito fue tal que 'Cabalgata' regresó a Valladolid el 4 de junio de ese mismo año. La jerezana ya se había hecho con el foco principal. «De las grandes ovaciones fue también partícipe Lola Flores, auténtica figura del arte gitano, solera y raigrambe de esencia cañí, que ha hecho popular su 'lerele', que interpreta con arranque único», decía la crónica del periódico, donde se aplaudía también su interpretación de 'Maldito seas'.

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Manolo Caracol y Lola Flores. EL NORTE

Lola Flores estaba a punto de despedirse de este proyecto porque el empresario Adolfo Arenzana la contrató como pareja artística de Manolo Caracol. El espectáculo 'Zambra', un auténtico fenómeno en la época, se estrenó en Valencia a finales de 1943, llegó al Teatro de la Zarzuela de Madrid en febrero de 1944 y, después de 150 funciones, los días 8 y 9 de julio de ese año, recaló en el Teatro Calderón de Valladolid.

«¡Exito! ¡Éxito! ¡Éxito!», decían por triplicado los carteles. Sobre las tablas:treinta artistas, quince cuadros, libro de Antonio Quintero y Rafael de León y música del maestro Quiroga. Cerrillo firmaba en El Norte la crónica de aquellas noches: «Tal vez lo más difícil en un artista es poseer personalidad y esta la posee –amplia y rotunda– esa magnífica artista que se llama Lola Flores, compendio de gracia, salero y vibración, que llena la escena por sí sola».

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Caricatura de Lola Flores y Manolo Caracol, obra de MIguel Delibes.

Fue tal el éxito, que 'Zambra' viviría nueva versiones en los años siguientes. Llenó tres días seguidos (9, 10 y 11 de febrero de 1945) el Lope de Vega. La publicidad del espectáculo ya colocaba a Lola Flores (su nombre en mayúscula)por delante del de Manolo Caracol (debajo y en minúsculas). «Lola luce su arte sin igual:nervio, arranque, figura, gracia, intuición. El milagro de su voz y de su 'zapateado' convierte una canción, por insignificante que sea, en una creación».

Con Manolo Caracol, Nati Mistral y Tony Leblanc

La pareja Flores-Caracol repitió éxito en el Lope de Vega en julio de 1946, el mismo mes de 1947 y mayo de 1948. En septiembre de 1950 actuaba en el Teatro Carrión con 'La maravilla errante', junto a Nati Mistral y Tony Leblanc. Los papeles ya le habían encontrado un nuevo apelativo: «Su simpatía, vivacidad y temperamento la hacen emperadora de este género». Y regresaba en diciembre de 1951 al Teatro Calderón, para participar en un festival benéfico a beneficio de la Campaña de Navidad junto a Marujita Díaz, Marianela de Montijo, Carmen Sevilla y los vallisoletanos Milagritos Campos y Pablo de Alba.

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Coque y Lola Flores. EL NORTE

Ese mismo año, Lola Flores rompía con Manolo Caracol. Un hombre ocuparía pronto su corazón: el jugador de fútbol vallisoletano Gerardo Coque, interior derecho del Pucela que debutó con la Selección Española y que fichó por el Atlético de Madrid. Contaba Lola Flores que comenzó a salir con Coque después de sufrir un «gran desengaño» con otro futbolista, Biosca, a quien quería dar celos.

«Mi vida por aquella época era un torbellino, una noche sí y otra también organizábamos fiestas», decía la faraona, que disfrutaba de las noches en Riscal, Morocco y otros locales de moda en Madrid. Después de una gira por América, Lola Flores regresó con un ligue de Panamá. «Coque seguía enamorado de mí y me dijo que si me quería casar con él. Le pedí quince días para pensarlo y comparar cuál me gustaba más, si él o el panameño», contaba Lola Flores. Coque se casó con otra. Pero la pasión entre futbolista y folclórica no se apagó. Volvieron a cruzarse en la noche madrileña y decidieron marcharse juntos.

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Afinales de 1954, después del estreno de 'Morena clara', Lola Flores viaja de nuevo a América y Coque se marcha con ella. La artista, dicen las crónicas, pagó 50.000 pesetas al Atlético para cubrir el incumplimiento del contrato del jugador. La relación, apasionada, duró poco. Coque regresó al fútbol y Lola Flores se casaría, en 1957, con Antonio González 'El pescaílla'.

En plena vorágine con Coque, Lola Flores actuó en Valladolid, el 12 de septiembre de 1954, en la Verbena de la Prensa, celebrada en las piscinas Samoa, junto a Conchita Montes y Marujita Díaz. El 15 de septiembre de 1984, Lola Flores, Carmen Flores y Lolita formaban parte del programa de las fiestas de San Mateo.

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