Izal se despide a lo grande en Sonorama del escenario que les encumbró

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El director del festival, Javier Ajenjo, desvelaba el nombre del grupo ante el fervor del público, que no dejó de cantar ninguno de los trece temas con los que Izal deleitó a los presentes. Los acordes de 'Copacabana' iniciaron una actuación mucho más cercana y con mayor energía que la de la noche anterior en el recinto. Había más sentimiento encima del escenario, en una puesta en escena a pelo, sin todos estos efectos de luz y sonido de los grandes emplazamientos.

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«En este festival, por primera vez, nos sentimos artistas, llevando una acreditación que así lo confirmaba. Hemos tocado en el camping, en los escenarios pequeños, aquí en la Plaza del Trigo y en el escenario principal», recordaba Mikel Izal en un momento entre canciones. También aludiendo a que en Sonorama hay «mucha magia y efectos especiales'.

El telón en la plaza del Trigo, como estaba cantado, se cerró con 'La Mujer de Verde', ante los gritos de «otra, otra…» de un público totalmente entregado que había vivido un sprint final intenso con 'El Baile', 'Pausa' y como homenaje a Supersubmarina, 'LN Granada'.

La de Izal no ha sido la única sorpresa de la mañana en Sonorama, el grupo Kitai, irrumpió a las 12:30 horas en plena Plaza Santa María, tocando a pie de suelo, ante el asombro de los presentes en esta céntrica plaza. Nunca se sabe dónde puede salta una nueva sorpresa en el Sonorama Ribera.