La exposición 'Indian Oddyssey' evoca el viaje de The Beatles a la India

Dividida en 5 'mantras', la exposición comienza con la figura del sitarista, continúa con la relación entre Shankar y Harrison, sigue con el propio viaje de la amplia comitiva de los Beatles en Rishikesh y finaliza con dos apartados basados en la influencia de Shankar en la música clásica y contemporánea, así como en la incidencia diacrónica de la música india en los fenómenos de fusión musical. Los seguidores de los Beatles también podrán disfrutar, en esta muestra, de la colección de instrumentos musicales de la India del siglo XVIII al siglo XX que recientemente se ha expuesto en la sede de Casa de la India en Valladolid.

El viaje de los Beatles al ashram de Maharishi Mahesh Yogui en Risikesh en febrero de 1968 fue, en cierto modo, la materialización geográfica de una expansión musical cuyos preliminares parten de tres años atrás. Harrison se convirtió en pupilo de Shankar en 1965 buscando una estimulación musical que el guitarrista de los Beatles estaba perdiendo a causa de giras para miles de fans pero con escasos medios técnicos para saborear el sonido en directo. Además, la introducción del sitar en el pop no solo llegó con Harrison, sino también con Brian Jones de los Rolling Stones. Previamente al viaje de The Beatles a la India, ya existía una primera corriente de psicodelia repleta de sonoridades indias a cargo de artistas como Strawberry Alarm Clock, el misterioso Lord Sitar, Jefferson Airplane, Donovan o The Byrds. El viaje de The Beatles a la India no supuso el origen de algo que ya no se conociera musicalmente, pero sí supuso la búsqueda material de encontrar nuevos horizontes mentales a través de la meditación trascendental , algo que especialmente George Harrison buscaba como sustitución natural y espiritual a los primeros experimentos lisérgicos con drogas químicas de toda una generación. El gurú Maharishi Mahesh Yogui se convirtió, por una breve temporada, en guía espiritual no solo de The Beatles sino de toda una comitiva que viajó con la banda de Liverpool a Rishikesh. Entre otros Mike Love de Beach Boys, Donovan, Paul Horn, Mal Evans, Mia Farrow y su hermana Prudence. Los cuatro beatles también se llevaron a sus parejas de aquellos años la modelo Pattie Boyd, Maureen Starkey, Jane Asher y Cinthya Lennon.

Mala adaptación

Buena parte de la expedición occidental de los Beatles en Rishikesh no cuajó todo lo que se esperaba en las costumbres, dietas y climatología de la India. El aislamiento en la India, suponía también un alejamiento prolongado de las playas californianas, de los locales de moda londinenses o neoyorquinos y de los horarios y estilos de vida occidentales. Prudence Farrow no salió de su habitación prácticamente en toda la convivencia, hecho que le sirvió a Lennon de inspiración para componer el clásico 'Dear Prudence'. Ringo Starr volvió a Inglaterra a los 10 días, probablemente tras acabársele su maleta de latas de Baked Beans. McCartney se aburrió de la meditación al cabo de un mes regresando con Jane Asher en sus últimos meses de noviazgo. Y poco después, las expectativas espirituales que Lennon había depositado en el Maharishi se vinieron abajo al llegarle rumores de que el gurú se había insinuado sexualmente con algunas mujeres de la corte beatle. Al respecto, Lennon compuso 'Sexy Sadie' trayéndose de vuelta a Inglaterra al resto de la expedición incluido el místico George Harrison. Años después, para muchos (incluido Macca) aquella desaprobación de Lennon evidenció su personalidad contradictoria y no siempre tan progresista: ¿Hippies desaprobando las debilidades terrenales de los hombres en el año del amor?…

Puede que no toda la comitiva de The Beatles conectara al cien por ciento con el karma en su retiro a Risikesh. Sin embargo, allí se compuso el grueso del material que conformaría el White Album del grupo con temas como 'Back in the USRR', 'I Will', 'Revolution', 'Blackbird', 'Mother Nature's Son' y otras tantas gestaciones de aquellas siete semanas en la India. Sin duda, aquella 'odisea asiática' supuso una corriente creativa que seguiría fluyendo en más discos de los Beatles y de sus miembros en solitario. Evidentemente George Harrison fue el que más ligado estuvo a la música de la India hasta el final de sus días. Con Ravi Shankar creó el disco 'Chants of India' y realizó una gira mundial en 1974. Su música y filosofía existencial estuvo ligada a la espiritualidad hindú hasta sus últimos momentos. Con menos regularidad pero con fortuna creativa, la influencia musical de la india apareció en varios momentos de las carreras de Lennon y de McCartney.

Principio del fin

Por desgracia, la época india de The Beatles fue también el principio de su fragmentación. En 1968, el grupo ni tenía manager (Brian Epstein falleció un año antes) ni mucho menos gurú. Pronto comenzarían las primeras salidas (temporales) del grupo a cargo de Ringo Starr y George Harrison. También llegaron sus problemas como 'empresarios' de Apple Records y su desapego de 'vida de grupo' en favor de 'vidas de pareja' y de carreras en solitario.

Y es que The Beatles fue también otro grupo que creyó que podría hacer todo lo que se planteara. Todo… excepto algo tan mundano como superar el desarrollo y crecimiento de sus propias relaciones personales… Ni tan siquiera con retiro espiritual mediante.