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Paco Ibañez, durante un concierto en Essaouira (Marruecos). Zacarías García
Paco Ibáñez: «Pareces un marciano cuando dices que aún te puedes emocionar con una canción»

Paco Ibáñez: «Pareces un marciano cuando dices que aún te puedes emocionar con una canción»

El patriarca de las voces de autor regresa a Madrid tras 14 años y prepara una gira con poemas musicados en los cuatro idiomas oficiales

ANTONIO CORBILLÓN

Domingo, 8 de mayo 2016, 19:16

. El vibrato de la voz de Paco Ibáñez (Valencia, 1934) es reconocible en cualquier tiempo. No importa que vaya camino de los 82 años. Ya dijo de ese tono José Saramago que «con la edad ha ido ganando un aterciopelado particular y una calidez que llega al corazón». El recio timbre del antifranquismo, que ahora vocea contra «los yanquis y su chicle», no descansa. Celebró sus 80 años con Vivencias, un resumen vital. Ahora y después de 14 años sin pisar Madrid, vuelve a la capital con su fórmula más característica: la de poner música a los poetas. Esta vez contemporáneos y de los cuatro idiomas oficiales (gallego, catalán y euskera).

Palabras con alas retoma el formato de A galopar (con textos de Rafael Alberti) y La voz y la palabra (José Agustín Goytisolo).

Me siento muy cómodo. Estoy en mi paisaje y en mi tierra. Es la primera vez hacemos un trabajo en los cuatro idiomas del Estado y... ¡vamos a ver cómo responde la gente!. La idea es que la diversidad lingüística de hoy esté presente en el escenario.

Usted siempre se ha definido como vasco-catalán-andaluz por sangre y, francés, claro.

Exactamente. Ahí se va a ver el mapa de lo que uno es y de lo que uno ha vivido. Todos somos un mapa que se va haciendo sin parar.

El trabajo de musicalizar poemas ¿cambia en función del autor o de su generación? La última vez que visitó Valladolid en 2011 junto a Joaquín Díaz y Marina Rosell, recordó aquella frase de José Agustín Goytisolo de que para sacar música de un poema «hay que hincar los codos».

Claro, y sobre todo cuando son poesía, los tienes que clavar todavía más. Quiero decir que no se hace de la noche a la mañana. Te puede salir antes o después si la inspiración te visita. En mi caso es el fruto de un trabajo previo, silencioso, de todos los momentos en que lo has madurado y que, poco a poco, se va construyendo.

Sus conciertos vuelven a incluir un recorrido por la literatura española de los últimos ocho siglos.

Sí. Es un repertorio que incluye canciones nuevas, otras que no he cantado, las que el público conoce y las que no. Y además no puedo escaparme de los temas que me piden porque tienen ganas de escucharlos. Porque hay canciones que la gente siempre tiene ganas de escuchar y el estado anímico amplifica los sentimientos que nos producen.

Han pasado 52 años de sus primeras canciones. Usted sigue con su eterno retorno.

El mejor eterno retorno es no irse nunca. Uno siente que ha nacido para cantar esas canciones y, cuando se presenta la ocasión, es tu momento de gloria personal.

La más bella niña fue su primera letra, basada en Góngora. Pero dejó más huella con la siguiente Es amarga la verdad. Eso si que no pierde vigencia. La realidad siempre tiene rostro poco humano.

Desgraciadamente es así. Solo tienes que salir de casa y pasearte un poco y ver el deterioro social y moral en el que vivimos. Gente maleducada, egoísta y ensimismada. No se nota que haya solidaridad en el ambiente. Cada uno va a lo suyo, ni te miran, ni te saludan. Eso se está desarrollando gracias a los yanquis. Ellos son el modelo que estúpidamente copiamos. Su objetivo es acabar con nuestro idioma y quedarse con todo: con su idioma y su chicle.

Siempre ha tenido enfilado al Imperio americano.

Ahora todo si se vende vale y si no se vende ¡fuera! Es la norteamericanada total. Estamos metidos dentro... ¡y la gente tan feliz! Mientras les des coches, motos, tenis y fútbol... toda esa porquería que solo es puro negocio.

Estos tiempos que inauguró el 15-M ¿vuelven a ser más proclives para los cantautores?

No notas que haya una demanda, unas voces que tengan ganas de escucharte y que les cuentes lo que tienes que decir o les quieres ofrecer. Está todo marcado por los medios de difusión comerciales. Y no hay más vueltas que darle.

¿No hay poesía en la globalización de las nuevas tecnologías?

No, nada. Pareces un marciano cuando dices que aún te puedes emocionar con una canción. Te miran y piensan ¿qué le pasa a éste? Se ha quedado en el año pum... debe ser un retrasado mental.

¿Los poemas respiran mejor y comunican más cuando se les pone música y se lanzan al público?

De eso sí estoy seguro. Un poema cuando se convierte en canción ya es para siempre, nadie lo podrá borrar. Tampoco nadie podrá borrar lo que está escrito.

Canta a la pluralidad lingüística en un país cada vez más crispado por las demandas de esas regiones históricas. Fíjese en Cataluña.

Ese antagonismo artificial que se ha creado es mentira. Yo nunca he visto a nadie que le rechacen en las calles de Cataluña por hablar castellano. Y al revés tampoco. Eso solo demuestra que Isabel la Católica sigue muy presente con esas ideas imperialistas. Sacarlas del tuétano del país sigue siendo muy difícil.

Catorce años sin cantar en Madrid para evitar un gobierno local conservador. ¿Qué espera?

Veremos en el estreno cómo responde la gente. Vengo a gusto y con ilusión de reencontrarme con el Madrid que queremos todos. El que resiste hasta el final, el Madrid de la cuna de la República. Ese es el Madrid en el que siempre quiero estar.

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