Francisco Cánovas, historiador
«Los radicales de derecha e izquierda despreciaron a Chaves Nogales porque les dejó desnudos»Secciones
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Francisco Cánovas, historiador
«Los radicales de derecha e izquierda despreciaron a Chaves Nogales porque les dejó desnudos»Entre el periodismo y la literatura, Manuel Chaves Nogales (Sevilla, 1897-Londres, 1944) dio cuenta de los acontecimientos históricos que afrontaron España y Europa en la primera mitad del siglo pasado, ofreciendo una visión humanista y alejada de los postulados más extremos, el fascismo, ... el nazismo y el comunismo. El historiador Francisco Cánovas Sánchez propone una aproximación biográfica a un autor del que, certifica, «hoy sería un periodista incómodo porque no seguía las doctrinas oficiales ni se regía por lo políticamente correcto». El viernes (20:00 horas) presenta en la Casa Zorrilla 'Chaves Nogales. Barbarie y civilización en el siglo XX' (Alianza Editorial).
–¿Qué le lleva a reivindicar la figura de Chaves Nogales?
–El suyo fue un testimonio de primer orden ante los grandes acontecimientos de su tiempo: la revolución rusa, la ascensión de Hitler al poder, la República y la Guerra Civil, la II Guerra Mundial, el exilio....y todo ello en una época en la que se estaba produciendo una confrontación entre el nazismo, el fascismo, el estalinismo y la democracia.Le gustaba viajara a donde se generaban las noticias, utilizaba el avión y retrató la Rusia de los zares y la comunista, advirtió del advenimiento del nazismo, entrevistó a los grandes protagonistas de esa época histórica y anticipó el nuevo periodismo de Wolfe y Mailer con una lucidez que aún hoy asombra.
–¿Por qué su obra y su vida pasaron desapercibidas hasta los años noventa?
–El entorno político franquista no favoreció que se le conociera en España. De hecho, después de morir en Londres, el Tribunal de Represión de la Masonería y el Comunismo lo condenó prohibiéndole acceder a cargos públicos, una medida absurda que solo pretendía enturbiar su imagen. El sectarismo político y el conservadurismo académico en instancias de la lengua y la literatura obviaron su obra, en la que ha habido un proceso de descubrimiento en el que han participado Isabel Cintas, y escritores como Trapiello, Muñoz Molina, Amat...También la extrema izquierda participó en el ocultamiento de su figura y su obra. Él era un hombre de centro izquierda, cercano a Azaña, un liberal progresista. Y ese espacio político fue condenado por la extrema derecha y la extrema izquierda. Ambos radicalismos han menospreciado a Chaves Nogales porque les dejó desnudos en una época en la que muchos periodistas y escritores importantes –como Hemingway– actuaban bajo consignas políticas del partido correspondiente; él no, era muy independiente y honesto, contaba lo que veía. Quería que el conocimiento de la historia sirviese para una convivencia democrática, abierta, respetuosa, que mirase al futuro.
–Dirigió el periódico 'Ahora', que llegó a tener una tirada de 250.000 ejemplares durante la República. ¿Cómo logró conectar con la opinión pública?
–Chaves era un gran emprendedor que supo rodearse de un gran equipo, con él colaboraban escritores como Pío Baroja, Valle Inclán... y sobre todo tenía un concepto de la información como servicio público, la consideraba esencial para que el ciudadano pudiera conocer y actuar con coherencia, de forma cabal. Hizo un periódico atractivo que fue el mejor de su tiempo.
–Cita en el libro a algunos estudiosos que reseñan que el periodista sevillano «no buscaba el término medio, sino la verdad; la ecuanimidad es el resultado, no una intención».
–Él tenía un compromiso con la verdad cayera quien cayera, por eso condenó durante la Guerra Civil a los asesinos de la extrema derecha y extrema izquierda, los bombardeos de la aviación franquista sobre la población civil y a los revolucionarios que hacían justicia por su cuenta.
–Cuenta que tomó partido por la República y compartía el proyecto de Azaña, pero que esos ideales no le impidieron reflejar sus luces y sus sombras.
–Hay gente en las trincheras y gente que no. Hay historiadores serios como Julián Casanova, Enrique Moradiellos, Sisinio Pérez Garzón, etc, que representan cada época y también las luces y las sombras de la República, como hizo Chaves Nogales. Siempre estuvo con la democracia, con las libertades, y eso lo hizo en la República, en la guerra y en el exilio. Poco antes de fallecer en Londres –no había cumplido 47 años– lamentaba ante su amigo Antonio Soto que era una pena que no pudiera llegar a ver el momento en que los aliados iniciaran la reconquista de Europa. Estaba convencido de que con la victoria aliada también en España se restablecería la democracia. Si no hubiera muerto tan joven habría dado muchos más frutos intelectuales, periodísticos y literarios que apreciaríamos mucho.
–¿Cómo habría contado el desafío independentista en Cataluña?
–Él era españolista. Como Azaña, concebía un estado integral que tuviese después una descentralización territorial. Él hoy habría defendido una profundización de la autonomía pero dentro de España. Fue muy crítico con quienes polarizaban la sociedad y generaban dinámicas de odio. Eso lo condenaría hoy, porque vemos que desgraciadamente hay brotes en esa dirección.
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