

Secciones
Servicios
Destacamos
La escritora leonesa Noemí Sabugal protagoniza dos actos culturales esta semana en Valladolid. Por un lado, realizará un encuentro con el público desde el Círculo ... de Recreo en el acto 'La cocina del escritor', como integrante del jurado en la inminente nueva edición del Premio de Novela Ateneo Ciudad de Valladolid. Por otro, de cara a la presentación de uno de sus últimos trabajos publicados, 'Laberinto mar: un viaje por la vida y la historia de nuestras costas' (ed. Alfaguara), la autora compartirá un encuentro con el público este viernes en la Fundación Segundo y Santiago Montes, en un acto junto al también leonés y poeta José García Alonso y el autor de las fotografías que figuran en el libro, Pablo J. Casal.
Tras tres años y medio de investigación y apoyada en una beca Leonardo, Sabugal accomete aquí un «tema enorme e inabarcable», en sus palabras: «Se aborda la circunstancia de ser un país rodeado por un mar, y cómo cruzando el océano existen otras veinte naciones que hablan nuestro idioma... una realidad con sus luces y sus sombras», explica. La autora de 'Hijos del carbón' no elude tampoco su literatura más social y política: «He conversado con muchas personas que trabajan ligadas al mar, desde sectores como la pesca hasta otros muy relevantes que con el tiempo han perdido cierto peso, como los astilleros».
De Viajeros a científicos, de la caza de la ballena a la perspectiva ecologista pasando por el cambio climático, e incluso puntos de vista ciertamente más insólitos, como la relación entre el mar y la mente, componen los temas de interés de este libro. Así, 'Laberinto mar' abarca desde cuestiones históricas hasta realidades hoy boyantes como el turismo o el comercio («El 80% de las mercancías vienen a España por mar, a través de los puertos de Algeciras y de Valencia»), en una nueva apuesta de su autora que, a su vez, conecta con varios de los ámbitos que gusta de abordar en su literatura.
«Siempre me ha interesado el mundo laboral, cómo no somos nuestro trabajo pero este siempre nos marca, a través de su dureza y sus circunstancias». Sabugal también ha querido valorar la reciente explosión de grisú en la mina de Cerredo, que se ha cobrado cinco vidas: «La minería siempre ha sido peligrosa pero no comparto la idea de fatalidad», apunta, recordando la recogida de testimonios de habitantes y trabajadores ante el fin de ese mundo que supuso 'Hijos del carbón':
«Es una crisis laboral y económica, pero también identitaria, que afecta a territorios y familias enteras». No ha querido Sabugal olvidar tampoco de 'los seis de Tabliza', cuyos fallecimientos siguen sin respuesta doce años después: «Es necesario investigar siempre en relación a qué ha pasado, la prevención de riesgos laborales, las condiciones en las que se trabajaba...», enumera.
«Como con las muertes en el sector de la construcción, es importante para las familias aportar las respuestas que, tras el shock inicial, ayuden a mitigar, de alguna manera, esa herida que les acompañará siempre», concluye la escritora.
Además de esta presentación en la Fundación Segundo y Santiago Montes, Noemí Sabugal participa este jueves en 'La cocina del escritor', un acto en el marco de las actividades Valladolid Letraherido, que desde el Círculo de Recreo suscitará una mesa redonda entre los distintos integrantes del jurado del 72 Premio de Novela Ateneo Ciudad de Valladolid. La autora coincidirá con Espido Freire, Gustavo Martín Garzo y Angélica Tanarro, en un encuentro moderado por Pedro Ojeda.3
«Este año ha habido una calidad muy buena, es un premio muy importante donde se presenta una gran variedad», anticipa Sabugal, con la tentativa de no revelar más de lo debido hasta la deliberación del fallo del jurado. En su experiencia con otros certámenes como el Felipe Trigo, el Tierras de León o el Premio Nacional de Narrativa, entre otros, la escritora identifica que el abanico de temáticas y perspectivas de las novelas a concurso a día de hoy es francamente amplio: «Hay personas que tratan temas contemporáneos, del interés de la gente corriente; y otros que presentan novelas históricas o que van a otros lugares: sin duda disfrutamos de una gran riqueza temática y estilística», aludió, en referencia a aquellos concursos de temática abierta.
«Es cierto que en los últimos años han aparecido muchos temas en torno a la precariedad laboral, el cambio climático o lo contemporáneo», concede; «pero la literatura española es enormemente diversa: hay géneros muy distintos desde lo histórico a lo distópico, desde lo arriesgado en lo formal hasta tramas más habituales».
Sabugal también encontró «igualmente estimulantes» los casos en los que un fallo es unánime y aquellos que suscitan un animado debate interno: «Ambas situaciones son muy interesantes, una por suponer un hallazgo que nos entusiasme a todos, la otra por provocar que surja una situación que permite contraponer diferentes puntos de vista».
Defiende la autora, por último, la calidad y profesionalidad de los jurados formados por escritores: «Somos, ante todo, lectores», recalca; y respalda a su vez la importancia hoy de los premios literarios: «Llegar con una distinción que se te coloca antes de aparecer en una librería es todo un empuje», asevera. «Después, la vida de los libros puede ser muy fortuita: hay 'longsellers' que se venden a lo largo del tiempo, otros que no tienen un gran desembarco publicitario pero conquistan a través del boca-oreja...». Son, concluye, «posibilidades azarosas, como las que determinan nuestras propias vidas».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Alberto Echaluce Orozco y Javier Medrano
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.