Nieto navegará por los ríos vallisoletanos de sus viñetas

«Aprender a hacer humor pensado en las ratas de agua a la orilla del Pisuerga fue tal vez el hallazgo más afortunado de mi carrera. Me dio el tono y el universo en el que he dibujado más de 9.000 viñetas», confiesa Nieto.

Tras un cuarto de siglo buscando la chispa de la realidad que dibujar cada día, aún no tiene respuesta para identificar el ingenio, la idea inspirada. «Sí puedo hablar de la yesca, de la materia reseca de la realidad contra la que uno se da cabezazos. Es verdad que el humorista gráfico hace su hoguera con cualquier cosa». También con su ciudad.

Así, ve un «Valladolid contradictorio: por ejemplo son 'Pajarillos Bajos' Cigüeña, Pelícano, Garza o Avestruz y 'Pajarillos Altos' Abubilla, Golondrina, Mirlo o Verderón. Tenemos un río Pisuerga que aparenta dar meandros caprichosos para cruzar la ciudad y un río Esgueva que da un gran rodeo aunque finja ser siempre recto. Tenemos una Estación Norte, al sur, el Poniente al norte del crepúsculo, un puente Colgante que no cuelga, una procesión del silencio bulliciosa y el barrio más ventoso y desapacible se llama Parquesol». El no patrimonio de la ciudad de la catedral inacabada, las ruinas del futuro que comenzaron en las ensoñaciones del Plan Rogers y esquinan el proyecto del soterramiento del tren o la 'Capilla Sixtina' del túnel de las Delicias convenientemente renovada en cada intento municipal de dignificarla, han sido dibujadas en sus editoriales.

«La mirada humorística es la mirada asombrada por lo contradictorio o lo paradójico; la tensión entre la convicción y la duda; entre lo que nos mantiene esperanzados y lo que tememos». De la capital del Pisuerga, a la región que capitanea, Castilla y León, y al mentidero nacional, la plaza madrileña. Por esos derroteros descubrirá hoy a partir de las 12:00 h. su trabajo el humorista José María Nieto.