Farraguas y Marta Baeza debutan con una obra que transcurre en Valladolid

La editorial Farraguas ha decidió nacer en pleno confinamiento y en soporte de papel. Remata el órdago debutar con una autora novel y una obra teatral que transcurre en Valladolid. Marta Baeza firma 'Siempre llueve en los entierros', un libreto de 2016 que ahora ve la luz.

Baeza es una periodista madrileña con raíces en Sahagún (León) que imaginó esta historia en Valladolid, la ciudad con la que tiene vínculos familiares y que ha frecuentado desde niña. «Por mi trabajo estoy en relación con compañías de teatro y siempre me llamó la atención», dice quien se ha estrenado con una obra que «ojalá se represente algún día». Carmen y Pablo son los dos protagonistas de este soliloquio que transita hacia el diálogo.

Matrimonio que ha convivido durante más de tres décadas, la muerte de Pablo es el detonante de siete escenas en las que se dibuja el fresco de lo vivido juntos, lo que se quiso vivir pero fue frustrado y lo que han vivido cada uno por su cuenta. Pablo fue mecánico en el ejército; Carmen, ama de casa. Una hija.

'Siempre llueve en los entierros' enseguida recuerda a 'Cinco horas con Mario', aunque Baeza se dio cuenta por voz de otros. «Escribo poesía y relatos, esta es la primera vez que me extendí. Es una historia que parte de vivencias propias, de lo que he visto a mi alrededor en la generación de nuestros padres. Gente que ha vivido sin plantearse cuestiones como la del género y que la muerte de uno provoca un vacío y un despertar a otras cosas a una edad avanzada».

En las redes desde la tumba

Carmen recibe una solicitud de amistad de su marido muerto, aunque desde la Universidad del Zángano en Nueva Orleans, ciudad del baile de los años veinte que le gustaban. «Me interesaba ver cómo funcionaba la identidad real y la digital en ellos, cómo nos vemos con distintos ojos y desde diferente perspectiva porque todos tenemos un perfil diferente. Pero ambos dicen cosas de la persona». Con ilustraciones de Edvard Munch, Farraguas factura su primer libro y tiene en galeras el siguiente, 'El manual del covidiota'. Nacida para albergar a «autores desatendidos» quiere recoger la creación de ambos lados de La Raya.